Los trabajadores de Página/12 repudiaron ayer la denuncia penal del Grupo Clarín contra un grupo de periodistas y se solidarizaron con los aludidos, “entre ellos nuestras compañeras Nora Veiras y Sandra Russo”, en lo que calificaron como “un claro ataque a la libertad de expresión. En ese sentido, condenamos cualquier intento de avanzar contra los derechos de los comunicadores, independientemente del medio de prensa al que pertenezcan”. “Como trabajadores de prensa queremos dejar sentada nuestra posición a favor del cumplimiento de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual”, afirmaron en un comunicado, y destacaron como “prioritario el mantenimiento de los puestos de trabajo en las empresas que deban presentar planes de adecuación”. Por último, manifestaron su “preocupación por los actores políticos y periodísticos que todavía no se pronunciaron frente a este intento de atropellar un derecho básico para la democracia”.