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El gobierno nacional recibió la noticia de la extensión de la cautelar interpuesta por el Grupo Clarín contra la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual como esas malas nuevas que se ven venir de lejos. “Nos estamos acercando al fondo de la resistencia corporativa: la Justicia como garante del orden conservador”, aseguraban anoche en la Casa Rosada, luego de que se conociera la decisión de la Cámara en lo Civil y Comercial. Para el ministro de Justicia, Julio Alak, quien anunció que el Estado “va a plantear la absoluta nulidad” de lo decidido, se trata de “un fallo arbitrario y grosero por sus contradicciones”.

Mientras la Presidenta analizaba el fallo en Olivos, se decidió acotar las voces que opinaran sobre el tema, para evitar que se distorsionara la postura oficial, cuya exposición quedó en manos del titular de la Afsca, Martín Sabbatella, y del ministro Alak. Según pudo averiguar Página/12, el Gobierno solicitará a la Corte Suprema que se avoque a resolver la medida cautelar sin demoras y buscará evitar los pasos previos habituales (presentar primero un recurso extraordinario y luego una queja).

“Tarde o temprano va a haber justicia”, se muestran confiados cerca de la Presidenta respecto del final de esta causa. El punto, claro, es lo que sucede mientras tanto. “Esto sirve para seguir desenmascarando a los poderes fácticos. Si nosotros no hubiésemos hecho todo lo que hicimos, esta cautelar se la hubiesen dado a Clarín sin costo: hoy buena parte de la ciudadanía puede ver que la Cámara es un foro cooptado por el grupo”, señalan.

Para la Rosada, la Cámara decidió beneficiar al multimedios “en más de lo que ellos mismos pidieron en la presentación” y eso “es la demostración de que el fuero Civil y Comercial funciona al gusto de las corporaciones”. “El objetivo de los jueces es muy claro –dijo al respecto Alak–: no interpretar el espíritu de desmonopolización de la ley y no interpretar la voluntad popular cuando convalidó al Poder Ejecutivo y a la Presidenta.”

Aunque demora las instancias administrativas, la extensión de la medida cautelar que beneficia a Clarín no altera los planes que tenía el kirchnerismo para este fin de semana: “Ahora más que nunca el 9D la gente tiene que celebrar la democracia que nos permite luchar contra los poderes concentrados como lo estamos haciendo”, señalaron fuentes del Gobierno.

Hasta ayer, estaba todo preparado para que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner hablara en la Plaza en el festival del domingo y “por ahora” los planes no se modificaron: la mandataria viajó anoche a Brasilia para participar de la cumbre del Mercosur y estará de regreso en el país el domingo para participar de las celebraciones por el Día Internacional de los Derechos Humanos y un nuevo aniversario, el 29º, del regreso de la democracia.