EL PAíS › OYARBIDE HARA UN JUICIO ORAL A PUERTAS CERRADAS
Alivio para Suárez Mason
Por Irina Hauser
Norberto Oyarbide, el mismo magistrado que juzgará mañana al represor Guillermo “Pajarito” Suárez Mason en un proceso oral por violación a la ley antidiscriminatoria, decidió proporcionarle la mayor de las comodidades para la ocasión. Dispuso que el juicio, aunque debe ser “público”, se haga “a puertas cerradas”. Los abogados de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), que es querellante en la causa, cuestionan la medida “porque no hay ninguna disposición legal que la respalde”. Su Señoría no parece dispuesto a dar marcha atrás.
“Yo no soy antisemita. A los judíos los conozco bien, que es distinto. Les tengo prevención, no obstante lo cual tengo muchos amigos judíos”, dijo. Suárez Mason pronunció esa famosa frase discriminatoria en 1996, en una entrevista que publicó la revista Noticias. La DAIA inició acciones, ya que la consideró abiertamente ofensiva contra la comunidad judía. En la causa también es querellante Guillermo Patricio Kelly. El represor había dicho que Kelly “no merecía respeto por estar al servicio de los judíos”.
Por tratarse en este caso de un juicio correccional, el mismo juzgado que condujo la instrucción es el que se encarga del juicio oral y público.
Oyarbide decidió suspender esta segunda condición de publicidad, que en realidad es pilar de los procesos orales.
–¿Por qué tomó esa decisión? –le preguntó Página/12 al juez.
–Porque el juicio se hace en mi despacho y entramos apenas unos pocos. Tiene que haber un cierto orden para desarrollarlo –contestó.
No es que Oyarbide no pueda conducir el juicio en otra sala. “Cada magistrado elige qué hacer”, dijo. Su medida, en el fondo, apunta a proteger a Suárez Mason de los escraches y manifestaciones. La abogada de la DAIA, Marta Nercellas, aseguró que “no existe ninguna disposición legal en la que se apoye el juez” y por eso pedirá que revise lo resuelto. “Sólo se dispone la privacidad cuando se trata de menores de edad o cuando están en juego delitos que puedan provocar pudor a las víctimas”, explicó.
El ex jefe del I Cuerpo de Ejército cumple arresto domiciliario en la causa de robo de bebés. El primer procesamiento por violación a la ley antidiscriminatoria se lo dictó el juez Claudio Bonadío. Aunque después la Cámara Federal firmó el sobreseimiento, Casación anuló ese fallo y volvió a la situación anterior. El juicio oral que llevará adelante Oyarbide podría agravar el panorama de Suárez Mason, ya que las penas previstas para sus delitos tienen un máximo de tres años.