El dólar se apreció ayer un centavo, a 5,27 pesos, con lo que acumula un incremento en lo que va del mes de 1,5 por ciento. El Banco Central absorbió de la plaza cambiaria 90 millones de dólares que apuntalaron la suba en el mayorista. En lo que va del año, la autoridad monetaria aceleró el ritmo de apreciación de la divisa estadounidense al 7,1 por ciento, hasta duplicar los registros de igual período de 2012 (3,9 por ciento). No obstante, la especulación por una mayor devaluación sigue presionando sobre el mercado paralelo, donde el dólar blue se ubica actualmente un 70 por ciento por encima del oficial, a 8,90 pesos. El stock de reservas cerró a 38.806 millones de dólares, unos 30 millones por encima del cierre anterior. En la Bolsa porteña, bonos y acciones operaron con mayoría de bajas.

Tras el reclamo oficial para que las exportadoras de granos liquiden los dólares de la venta de sus cosechas, el volumen de negocios en el mayorista recobró dinamismo. Esta situación le permitió al BC retomar su postura compradora en el mercado, acumular reservas y direccionar la evolución del tipo de cambio sin permitir desvíos significativos en la cotización. La demanda privada de dólares se encuentra además limitada con las restricciones a la compra de moneda extranjera. Bajo este esquema el Central aceleró la devaluación del tipo de cambio. En los últimos 12 meses la suba del dólar fue de 17,4 por ciento, contra el 9,5 por ciento con que se apreció la divisa en el mismo período previo (de mayo de 2011 a mayo de 2012).

En el mercado de futuros, los contratos que se pactan por estos días dan cuenta también de esta aceleración. El contrato que vence el viernes próximo ubica al dólar a 5,278 pesos, mientras que para el cierre de junio se pactaron en 5,365 pesos y los compromisos a julio se acordaron en 5,46 pesos. Estos últimos convalidan apreciación del 1,7 por ciento, similar al promedio que exhibió todo el año. El volumen negociado en el mercado de contado ascendió a 295,2 millones de dólares, mientras que en futuros sumó 62,1 millones.

En el paralelo sigue la alta volatilidad. Pese a que ayer se registraron pocas operaciones, debido a que muchas cuevas financieras decidieron cerrar sus puertas ante una eventual clausura por parte de inspectores de la AFIP y BCRA, éstas se realizaron a 15 centavos por encima de los precios de la víspera y promediaron entre 8,90 y 8,95 pesos. La presencia en las operaciones de contado con liquidación –con empresas que colaboraron con la tarea– mantuvo el costo de arbitrar acciones y bonos entre la Bolsa porteña y los mercados del exterior en 8,58 pesos. Esta intervención se replicó además en las cotización de los papeles utilizados para la operatoria que cuentan con un mercado en el exterior.

Las acciones líderes cerraron una semana netamente en baja, donde apenas se registró un cierre neutro anteayer. Con un retroceso de 1,34 por ciento cierra la semana en 3509 puntos, y acumula desde el viernes pasado un retroceso de 5 por ciento. Dentro del panel MerVal se destacaron las caídas de los papeles de Pampa Energía (de 3,4 por ciento), Petrobras (3,1), Comercial del Plata (2,6) e YPF (2,5). El monto de negocios fue de 31,4 millones de pesos, menos de un tercio del volumen de la semana pasada, lo que restó dramatismo a la caída. Por su parte, el directorio del Merval convocó a asamblea extraordinaria para el 27 de junio para tratar la escisión parcial de la sociedad y constituir la denominada Bolsas y Mercados Argentinos, que se adecuará a los cambios introducidos con la sanción de la ley 26.831.

El recorte abarcó también al segmento de renta fija. Entre los bonos con mayor circulación se destacó la caída del Bonar 2013, con el 2,2 por ciento, mientras que el Boden 2015 perdió 1,5 por ciento. La excepción fue el Cupón PIB en pesos, que avanzó 1,4 por ciento y en lo que va del mes acumula un alza de 15,3 por ciento, impulsados por mejores perspectivas de crecimiento para este año, lo que gatillaría un nuevo pago en diciembre de 2014.