El juez federal de Lomas de Zamora Alberto Patricio Santamarina encabezó ayer un procedimiento en el aeropuerto internacional de Ezeiza para determinar el origen de las imágenes difundidas en televisión de la llegada del fiscal Alberto Nisman al país, días antes de presentar su denuncia de encubrimiento contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Un empleado de la Aduana, identificado como Gonzalo Patricio Tzareff, fue detenido por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, acusado de acceder a material vedado y entregarlo a la prensa.

Acompañado por agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y de la Policía Metropolitana, el juez Santamarina llevó a cabo un procedimiento en el centro de monitoreo del aeropuerto de Ezeiza y revisó las cámaras de la terminal A, sector al que llegó Nisman cuando retornó de sus vacaciones en Europa. El centro de monitoreo reúne la información de 500 cámaras dispuestas en el aeropuerto internacional, que son manejadas exclusivamente por la PSA, encabezada por Germán Montenegro. El personal de Migraciones, Aduana y de la Secretaría de Inteligencia puede acceder a las filmaciones y hacer seguimiento del material registrado por las cámaras sólo cuando éste se relaciona con alguna investigación propia en curso. En este marco, el empleado de Aduana Gonzalo Patricio Tzareff fue detenido por haber accedido a material vedado y facilitarlo al canal de noticias C5N. Tzareff fue imputado en una causa por “abuso de autoridad” y permanece alojado en el penal de Ezeiza. Al ser interrogado por el juez Santamarina, el empleado de Aduana admitió sus cargos y confirmó que filmó las imágenes de Nisman desde el monitor con su celular; a eso responde el aparente “seguimiento” que hace la cámara sobre la figura del fiscal.

Tras la muerte del fiscal, el canal de noticias C5N difundió imágenes de Nisman en su arribo al país y llamó la atención –incluso de la jueza de la causa, Fabiana Palmaghini– el aparente seguimiento que se hacía sobre su figura. En la filmación se veía al fiscal en diferentes áreas del aeropuerto de Ezeiza, hablando por teléfono, esperando las valijas y haciendo el trámite migratorio junto a una persona que, según determinó posteriormente la fiscal Viviana Fein, era uno de sus custodios.

La causa por el supuesto “seguimiento” de Nisman con la cámaras de seguridad se inició a principios de febrero por una denuncia del fiscal Guillermo Marijuan. La presentación fue radicada originalmente ante el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, que se declaró incompetente por razones territoriales, lo que derivó en que la causa fuera remitida a Lomas de Zamora, con jurisdicción sobre Ezeiza.

El viernes 27 de febrero, la fiscal federal de Lomas de Zamora Patricia Cisnero requirió la apertura de una investigación para saber si Nisman fue efectivamente seguido por las cámaras de Ezeiza y pidió varias medidas de prueba, entre las que se incluyó un peritaje para determinar si las imágenes difundidas por televisión habían sido manipuladas o eran fieles a las filmaciones de aquel día.