“Recuperamos los ferrocarriles para todos los argentinos porque creemos que es una herramienta fundamental para el desarrollo económico”, afirmó ayer el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, durante la promulgación de la ley que refundó la empresa Ferrocarriles Argentinos. El acto en la estación de Retiro estuvo encabezado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner (ver aparte). Cuando la legislación sea reglamentada el Estado pasará a ser el encargado de planificar, ordenar, controlar, priorizar y gestionar en forma integral el sistema ferroviario carguero y de pasajeros. “Estamos reparando una deuda que tiene más de medio siglo, devolviendo parte de la memoria que les habían robado a muchos argentinos que crecieron en torno del desarrollo del ferrocarril. Es un acto de justicia social porque el tren integra, da inclusión a lo largo y ancho del país”, afirmó el funcionario y precandidato presidencial.

“No existe el amor, sino las pruebas de amor, por eso hemos llevado adelante un proceso de recuperación fenomenal en los trenes de cercanía”, sostuvo el funcionario. Las distintas herramientas contempladas permiten profundizar el rol del Estado en el proceso de transformación iniciado luego de la tragedia de Once, en febrero de 2012. “No sólo hemos incorporado mil doscientos coches, sino que también estamos llevando adelante 3700 kilómetros de vías nuevas, para el sistema de pasajeros”, detalló el funcionario. “No hay ninguna posibilidad de llevar adelante ninguna gestión exitosa si previamente no hay una buena decisión política”, remarcó el titular de Interior y Transporte.

El nuevo esquema que establece la ley promulgada ayer complementa los pasos dados a lo largo de los últimos tres años para comenzar a reparar más de tres décadas de abandono de la política ferroviaria. En ese proceso se destacan la compra de formaciones de pasajeros, vagones de carga y locomotoras cero kilómetro realizada a fabricantes estatales chinos, la renovación de vías, las obras de infraestructura, la construcción de pasos a nivel, la renovación de las estaciones y los cambios institucionales-administrativos.

“Estoy convencido de que todos los argentinos vamos a defender todos los logros. Yo, Cristina, como militante político me comprometo a defender la recuperación ferroviaria, la recuperación de YPF, la política de derechos humanos, el Fútbol para Todos, la aplicación definitiva de la ley de medios para que todos juntos avancemos en la consolidación definitiva de la Argentina”, expresó Randazzo antes de cederle la palabra a CFK.

El acto se realizó en la estación de Retiro. La elección del lugar no fue casual. Randazzo recordó que el 1º de marzo de 1948 el presidente Juan Perón decidió “nacionalizar los ferrocarriles en este mismo lugar, convencido de que era un acto de soberanía”. Desde el Gobierno reconocen que persisten desafíos de mediano plazo como la reactivación del deteriorado sistema carguero y el impulso a una desintegrada industria ferroviaria nacional.

“La Presidenta ha decidido estatizar el Belgrano Cargas y sacárselo de las manos a empresarios, como la familia Macri, y sindicales, que son los mismos que están convocando el paro general para la próxima semana, son los mismos que destruyeron el ferrocarril”, apuntó Randazzo desde el estrado donde estuvo acompañado por la mandataria, el ministro de Economía, Axel Kicillof, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el secretario general de la Presidencia, Eduardo de Pedro.

La ley anunciada por CFK durante la apertura de las sesiones legislativas introdujo cinco cambios estratégicos: recupera el control de las vías a manos del Estado, pone a cargo del sector público la gestión de los sistemas de control de circulación de trenes, establece un esquema de acceso abierto a los ramales, habilita la reconfiguración de las concesiones vigentes y define requisitos para los privados que quieran registrarse como operadores. Las concesiones que siguen en pie como resultado del proceso privatizador serán revisadas. Sin embargo, el nuevo esquema no prohíbe que las empresas privadas corran trenes. Las compañías seguirán trabajando en distintos ramales.

“Esta ley que crea la empresa Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado fue sancionada por una amplia mayoría, eso nos marca que el camino elegido es el correcto. Hubiéramos querido que aquellos que acompañaron esta ley hubieran acompañado la recuperación de YPF, de Aerolíneas Argentinas. Pero todos aprendemos de los errores”, lanzó el funcionario al referirse al respaldo prácticamente unánime que recibió la iniciativa en el Congreso. En la Cámara de Diputados, sólo la izquierda del FIT y Victoria Donda (Libres del Sur) votaron en contra, mientras que en el Senado los que expresaron su voto negativo fueron Pino Solanas (Proyecto Sur) y Norma Morandini (Alianza Frente Cívico).