Por tercer día consecutivo el kirchnerismo y el macrismo se cruzaron por el nuevo ideario del PRO, que defiende la recuperación de empresas por el Estado realizado por el Frente para la Victoria. “Veamos el lado bueno: si ahora están de acuerdo con la AUH (Asignación Universal por Hijo), Anses, YPF y Aerolíneas, la #BatallaCultural la ganamos todos los argentinos”, tuiteó el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” De Pedro. Mientras tanto, el precandidato presidencial Mauricio Macri reconoció que “hubiese sido una catástrofe” perder en la Ciudad de Buenos Aires, a la vez que no se hubiera “sentido con autoridad” para continuar con su campaña presidencial. El jefe de Gobierno porteño trató de justificar su giro discursivo: “En la Ciudad de Buenos Aires en estos siete años y medio he construido más Estado”.

“Se la pasan criticando a @CFKArgentina y cuando se acercan las elecciones se pelean por parecerse a ella. Eso no nos sorprende”, publicó De Pedro en su cuenta de Twitter, apuntando a Macri, pero también a dirigentes como el radical Ernesto Sanz que también intenta adosar a su discurso varios de los logros del kirchnerismo a pesar de haber sido un crítico acérrimo de la AUH. Por su parte, Macri contraatacó al señalar que “la Presidenta siempre tiene la facilidad de leer lo que le gusta de cada cosa, y no leer el conjunto”. A pesar de su cambio de postura, el postulante presidencial de Cambiemos trató de diferenciarse: “Yo les digo a ellos que levantan la bandera del Estado y quieren hacerse los dueños del Estado en términos del discurso, pero lo que hacen es ser dueños del Estado en términos de la arbitrariedad del manejo de los recursos, porque solamente han usado el Estado para darles laburo a los muchachos de La Cámpora”, remató.

La polémica transformación del discurso del macrismo se produjo a partir del ballottage porteño, en el que el PRO sintió cómo el candidato de ECO, Martín Lousteau, casi le arrebata el Gobierno de la Ciudad. Macri pareció entonces dar un vuelco discursivo que incluyó alabar las reestatizaciones de la petrolera estatal y de la aerolínea de bandera, así como garantizar que no iba a tocar la AUH, cuando en el Parlamento sus legisladores votaron negativamente. De Pedro aprovechó para remarcar esa contradicción: “Sorprende que estén de acuerdo con muchas políticas a las que se opusieron cuando tuvieron que votar en el Congreso. ¿Vieron?”, señaló.

Otro de los funcionarios que salió al cruce de la mutación macrista fue el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. “Después del discurso del domingo, no sé si el compañero Macri está hablando de otras cosas, porque no se sabe exactamente a qué refiere”, aseguró en tono irónico el precandidato a gobernador bonaerense. El funcionario se refería al error del jefe de Gobierno quien prometió que si es electo presidente convertirá en ley la AUH, cuando esa iniciativa ya fue aprobada recientemente en el Congreso. El jefe de Gabinete dijo que desconoce por qué Macri cambió el discurso. “Creo que su gurú (Jaime) Durán Barba le dijo que lo tenía que cambiar y tiene tanta ascendencia sobre él que lo cambió sin pensarlo”, remató.

En contrapartida se expresó la candidata a gobernadora bonaerense del PRO y vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal, que salió a defender a su líder y jefe político. Según Vidal, era “mentira lo que se dijo sobre que íbamos a sacar la AUH o que íbamos a privatizar todo si Mauricio es presidente”. En la misma línea, el diputado de PRO Federico Pinedo intentó demostrar la coherencia partidaria. Sostuvo que “no hay contradicciones” porque en el caso de Aerolíneas Argentinas “el PRO propuso crear una empresa estatal de cero que no tuviera ninguna deuda”. Para Pinedo, el kirchnerismo “logró imponer su punto de vista y entonces les enchufaron la deuda de los españoles a los argentinos”.

También el gobernador salteño del FpV, Juan Manuel Urtubey, se subió al debate el giro del PRO: “Macri advirtió que si no se pegaba a los logros que el pueblo argentino conquistó en los últimos doce años iba a tener nula posibilidad de éxito”, en sus planes para disputar la presidencia.