Intendentes y legisladores bonaerenses del Frente para la Victoria acordaron ayer trabajar en conjunto para elevarle al gobierno provincial una nueva propuesta que avale el endeudamiento requerido por la mandataria María Eugenia Vidal para avanzar con la aprobación del presupuesto para este año. “Van a tener presupuesto y endeudamiento, pero pedimos gobernabilidad recíproca”, plantearon los jefes comunales en el encuentro que tuvo lugar en La Plata y al que asistieron casi cincuenta de ellos y buena parte de la bancada peronista en ambas cámaras del parlamento local. Durante la reunión decidieron conformar una comisión más reducida que trabajará en el contraproyecto que se presentará a Vidal, asumiendo los niveles de deuda solicitados a cambio de garantías acerca del uso de esos fondos y un replanteo de la coparticipación. La idea es aprobar presupuesto y endeudamiento la semana próxima.

En un comunicado que difundieron por la tarde, se destacó “la importancia de seguir construyendo acuerdos para aportar y acompañar la propuesta del oficialismo” para el presupuesto 2016 pero también se advirtió la necesidad de que “el presupuesto contemple además las necesidades de los municipios en lo que respecta a seguridad, infraestructura, salud y educación que hoy en muchos casos corren por cuenta de los intendentes y deberían ser asumidos por el ejecutivo provincial”. Además, los representantes del Frente para la Victoria aseguran que “van a acompañar la propuesta de endeudamiento en la medida que pueda justificarse” el uso que se le va a dar, y “reclamaron la ampliación de los fondos coparticipables” y “las partidas pertenecientes a diferentes leyes sancionadas por la legislatura”.

Del encuentro participaron representantes de todos los sectores del Frente para la Victoria y buscaron dejar atrás, con el documento conjunto, rumores de un a ruptura al interior del bloque por las negociaciones alrededor del presupuesto. Según el texto, los intendentes “desmintieron distintas versiones planteadas en los medios de comunicación sobre diferencias en el trabajo realizado por los legisladores del bloque y ratificaron el rumbo asumido en las reuniones que fueran realizadas desde la llegada del presupuesto a la legislatura”. El jefe comunal de Hurlingham, Juan Zabaleta, reconoció en diálogo con Página/12 que si bien “hay diferencias de matices” al interior del FpV bonaerense, “nunca hubo riesgo de quiebre” porque “el peronismo en épocas de crisis siempre se junta”. Para Zabaleta, “es necesario que se apruebe el presupuesto para que pueda gobernar Vidal y también podamos gobernar los municipios”, por eso se acompañará la propuesta del oficialismo siempre y cuando se garantice la “gobernabilidad recíproca” a los intendentes. “No se trata de un poroteo de tantos millones para tal o cual a cambio de los votos necesarios para aprobar el endeudamiento. Nosotros necesitamos recursos para la seguridad, la educación y los hospitales, y esa responsabilidad debe ser compartida con el gobierno provincial”, explicó el intendente de Hurlingham, que anticipó que de todas formas la aprobación estará subordinada a que se produzcan “algunos cambios”, se den “precisiones de hacia dónde va a ir el dinero del endeudamiento” y haya “mejoras en los fondos coparticipables”.

Mañana se realizará la primera reunión de la mesa reducida que estará a cargo de llevar adelante las negociaciones. Allí habrá seis representantes de los intendentes (dos de la primera sección, dos de la tercera y dos del interior) además de senadores y diputados bonaerenses. Algunos jefes comunales esperan que esto destrabe rápidamente el conflicto y la semana que viene la legislatura de la provincia pueda aprobar finalmente el presupuesto, facilitando las partidas para los municipios. Dentro del FpV algunos no son tan optimistas y reclaman “terminar de afinar el lápiz” antes de dar los votos. Estiman que la negociación con el oficialismo puede llegar a estirarse todavía hasta la segunda quincena de enero o incluso hasta fin de mes.