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El tiempo pasa y la capital de San Luis sigue con dos intendencias paralelas. La resolución de este conflicto que enfrenta desde noviembre del año pasado a Daniel Pérsico, un opositor a los Rodríguez Saá, y a la oficialista María Angélica Torrontegui quedó finalmente en manos de la Corte Suprema, que se encamina a dar una definición. Previendo que el Gobierno les pediría que se hagan cargo de saldar la cuestión, los supremos resolvieron en su reunión plenaria de ayer a la mañana pedirle un dictamen al procurador general, Esteban Righi, como paso previo a emitir un fallo. Por la tarde, el presidente del tribunal, Enrique Petracchi, recibió la visita de Aníbal Fernández, que le informó que la mediación que intentó el Gobierno había fracasado y que, por ende, esperaba que la Corte tome cartas en el asunto. “No hay consenso para una solución política y por eso no tenía sentido que dilatáramos esto”, explicó Fernández después del encuentro, en el que entregó un escrito con un detalle de los intentos por lograr un acuerdo. En el alto tribunal ya se celebró una audiencia de conciliación, que no rindió demasiados frutos. Pérsico se considera mandatario legítimo por haber ganado las elecciones del 9 de noviembre que habían sido convocadas por su antecesor. Torrontegui sostiene que ella es la verdadera intendenta por haber triunfado en los comicios que se hicieron a finales del mismo mes por decisión del Superior Tribunal de San Luis que anuló los comicios que habían consagrado a Pérsico. La Corte Suprema podría definir cuál de los dos procesos electorales es válido o, lo que es más probable que ocurra, propiciar un nuevo llamado a elecciones. El alto tribunal no correría el riesgo de alinearse con los Rodríguez Saá. “Va a sopesar la cuestión política”, explicó un allegado a los cortesanos.