EL PAíS › LA JUSTICIA LE PROHIBIO A PALLEROS SALIR DEL PAIS
Para que no lo visite a Carlos
El juez Julio Speroni le prohibió al coronel retirado Diego Palleros salir del país, un día después de que se negara a declarar en la causa por la venta ilegal de armas.
Por Adriana Meyer
Aunque los allegados al coronel retirado Diego Palleros aseguran que no tiene pensado moverse, el juez en lo penal económico Julio Speroni le prohibió la salida del país, haciendo lugar a un pedido de la fiscal Alicia Sustaita. La medida suena lógica teniendo en cuenta que el sindicado traficante de armas estuvo ocho años prófugo, pero su abogado le restó importancia porque le pareció “una disposición de rutina”. Speroni lo indagó el miércoles en la causa sobre el contrabando de armas a Croacia y Ecuador, la misma que llevó a Carlos Menem tras las rejas, y en los próximos días tiene que definir su situación procesal. Al llegar al país, Palleros había implicado al ex presidente en el caso, pero en su declaración prefirió callar. De todos modos, la situación de Menem se define en estos días en la Cámara de Apelaciones en lo penal económico.
Según Isaac Wieder, defensor de Palleros, “toda persona que tiene una causa penal debe estar a disposición de la Justicia”. Sin embargo, ante Página/12 se mostró sorprendido de la difusión por parte del juzgado de una medida que consideró “de rutina”. E insistió en que “no tiene ningún motivo para irse, está aquí con sus familiares”. Este diario le preguntó si la prohibición de salir del país podía interpretarse como una señal de los próximos pasos del magistrado. “Quizá sea procesado, pero no creo que ordene su detención”, especuló Wieder.
Palleros estuvo prófugo en Sudáfrica desde 1996, cuando el juez Marcelo Aguinsky ordenó su captura, sin que le preocupara perder la fianza de 500 mil dólares que le habían impuesto. Sólo estuvo preso algunas semanas en una cárcel de Pretoria, pero recuperó la libertad porque ese país rechazó el trámite para su extradición. Regresó a Argentina el 13 de septiembre, después de que la Cámara de Casación le concediera la exención de prisión. Desde el punto de vista técnico no le habría correspondido, pero los camaristas Alfredo Bisordi y Juan Rodríguez Basavilbaso entendieron que su presencia en el país podía propiciar el avance del expediente. Esta situación no parece haberse concretado, dado que Palleros se negó a responder las preguntas de Speroni durante la indagatoria.
En Tribunales consideran que el coronel retirado, intermediario en las ventas ilegales de armas realizadas entre 1991 y 1995, podría quedar detenido porque la exención de prisión era para el período previo a la definición de su situación. Conocida la medida de Speroni, ayer hubo especulaciones en torno del destino inmediato de Palleros. En coincidencia con el pesimismo de Wieder, que dio por sentado que su cliente será procesado, las fuentes consultadas coincidieron en que el magistrado no le habría advertido sobre la necesidad de que permanezca en el país si estuviera evaluando dictarle una falta de mérito. La mayoría leyó que Speroni lo procesará y algunos arriesgaron que será con prisión preventiva. El razonamiento se basa en que el magistrado podría considerarlo partícipe necesario y no secundario de la maniobra, en la que se produjeron transferencias por unos 50 millones, además del pago de comisiones.
Apenas llegado desde Sudáfrica, Palleros relató que el interventor en Fabricaciones Militares Luis Sarlenga le pidió 200 mil dólares porque se lo había requerido el ex cuñado de Carlos Menem, Emir Yoma. En una entrevista con el diario La Nación, señaló que el ex presidente tuvo responsabilidad en los envíos de armas. Esta verborragia no tuvo su correlato en el expediente, al parecer por indicación de su abogado. Wieder planteó que la indagatoria no debía realizarse porque considera que no existió contrabando, porque “el Estado no puede contrabandearse a sí mismo”, y que, eventualmente, ese delito está prescripto. Y por eso le indicó a su cliente que no accediera al interrogatorio. Se presumía que esta declaración influiría en la decisión de la Cámara, que tiene que definir si ratifica o revoca la falta de mérito de Menem. Pero, por ahora, los camaristas de la sala B se mantienen ajenos al expediente de Speroni.