EL PAíS › LA CAUSA POR LA REPRESION DEL 2001
Un ascenso escondido
El comisario Ernesto Weber, uno de los responsables de la represión del 2001, fue ascendido. Hoy lo escrachan.
Por Adriana Meyer
Su nombre volvió a sonar cuando Silvia Roveda, la esposa del odontólogo asesinado a principios de junio en un asalto, se pegó un tiro. La mujer dejó una carta de agradecimiento para el comisario Ernesto Weber. Este policía participó de la represión a la manifestación contra el Código Contravencional, en julio de 2004. Y antes aún, fue el jefe de los que dispararon el 20 de diciembre 2001 en Avenida de Mayo y 9 de Julio, y asesinaron a Gastón Riva, Diego Lamagna y Carlos “Petete” Almirón. Por ese hecho aún está imputado en la causa judicial. Sin embargo, esto no impidió que fuera ascendido a comisario. Hoy Almirón hubiera cumplido años, y por eso organismos sociales y de derechos humanos le harán un escrache a Weber frente a la comisaría 27ª que comanda, en Villa Crespo.
El padre de Ernesto Sergio Weber es un subcomisario retirado de la Federal, alias “El Maestro” o “220”, conocido además como Armando o Rogelio. Ernesto Enrique Frimon Weber estuvo en Operaciones de la ESMA entre 1977 y 1978. Enseñó a los marinos a usar la picana eléctrica y participó de los secuestros de Graciela Daleo, Norma Arrostito y Alicia Milia. Integró el grupo de tareas que emboscó a Rodolfo Walsh en San Juan y Sarandí, y fue quien le disparó. Integró la lista de 46 represores requeridos por el juez español Baltasar Garzón y está implicado en la causa ESMA, aunque permanece en libertad.
El 20 de diciembre, cuando el gobierno de la Alianza agonizaba y se produjo el levantamiento popular, Weber hijo tuvo un rol activo en la represión. Los testigos de la muerte de Almirón, Lamagna y Riva sólo pudieron declarar que quienes les dispararon llevaban el casco “tortuga” que usa la Infantería. Aquel día, Weber era el jefe del Cuerpo Operaciones Federales (COF 2) integrado por la Infantería de la Policía Federal. “Weber tuvo durante las horas del conflicto un rol preponderante en la represión de los manifestantes, especialmente en la zona de Avenida de Mayo donde se produjeron homicidios y lesiones aún no esclarecidos”, escribieron los jueces de la Cámara Federal Gabriel Cavallo y Horacio Vigliani. “Esta sala reitera que se deberá profundizar la investigación respecto de los hechos ilícitos que fueran ya señalados” en julio de 2002, le indicaron los camaristas a la jueza del caso. María Servini de Cubría sólo había indagado a Weber por las lesiones que sufrieron manifestantes y Madres de Plaza de Mayo, pero le dictó la falta de mérito por esos hechos. Tres años y medio más tarde era subcomisario de la seccional Primera cuando participó de la represión en la Legislatura contra los manifestantes que se habían convocado para repudiar la sanción del Código Contravencional. En esa causa declaró como testigo y afirmó que “ese día (16 de julio de 2004) se movió en las inmediaciones del edificio evitando agresiones”, y ordenó varias detenciones que ocurrieron mucho más tarde de los hechos y en lugares alejados de la Legislatura.
Si bien tiene falta de mérito en la causa del 20 de diciembre, sigue implicado porque aún no obtuvo un sobreseimiento. Según las reglas internas de la Federal, debiera tener un sumario administrativo abierto, con ascensos suspendidos, o estar en disponibilidad. Sin embargo, la poco clara redacción de esas normas permite que la fuerza las aplique con discrecionalidad y los uniformados son congelados sólo cuando el clamor mediático logra imponerse.
Ya en su nuevo cargo, investigó el homicidio del odontólogo Carlos Roveda, ocurrido el 5 de junio. Hay cuatro detenidos por ese crimen y los investigadores aseguran que esto no hubiera sido posible sin el aporte de Silvia de Roveda, quien reconoció a los sospechosos. El 13 de julio la mujer escribió dos cartas y se quitó la vida con un disparo en el corazón. En una de ellas, dedicada al marido, decía que al identificar a los asesinos había cumplido con “su misión”. La otra es de agradecimiento al comisario Weber, al inspector Smith y al fiscal del caso, Martín Niklison. Hoy Weber recibirá otra demostración pero no de gratitud. A las 11.30 la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), el Movimiento 29 de Mayo, la Coordinadora Antirrepresiva Carlos Almirón, la Mesa de Escrache Popular y otras organizaciones cortarán el tránsito en Angel Gallardo y Corrientes, y luego marcharán hacia la comisaría 27ª, ubicada en Camargo 645. Allí realizarán un escrache al comisario, en homenaje a Almirón, quien hoy hubiera cumplido 27 años.