EL PAíS › CRISTINA KIRCHNER PROMUEVE UN ACUERDO REGIONAL
Un consenso latinoamericano
En un encuentro organizado por el embajador de Brasil, la candidata a senadora bonaerense lanzó la idea de impulsar un consenso alternativo al de Washington y anunció la visita del economista Joseph Stiglitz.
“La Argentina puede ser vista como un modelo absolutamente alternativo al Consenso de Wáshington”, afirmó la senadora Cristina Fernández de Kirchner durante una reunión con los representantes diplomáticos de América latina en el país. El encuentro fue organizado por el embajador de Brasil en la Argentina, Mauro Vieira. La senadora aprovechó la ocasión para promocionar un seminario del Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz sobre políticas alternativas al Consenso de Washington. El Gobierno construyó una relación cercana con Stiglitz, en especial a través del cónsul en Nueva York, Héctor Timerman, y sus colaboradores.
La comida se realizó en su residencia y participaron los embajadores de Brasil, Honduras, Costa Rica, Cuba, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Chile, Paraguay, Panamá, Dominicana, Uruguay, México, El Salvador, Guatemala y Haití. Estos diplomáticos integran el Grupo Latinoamericano. Aparte de Cristina Kirchner, estuvieron el canciller, Rafael Bielsa, y su segundo, Jorge Taiana. Como los tres son candidatos, el encuentro estuvo teñido por cierto tono electoral: el embajador brasileño dijo que les interesaba conocer “la opinión sobre la situación regional y mundial” de la primera dama “en un momento tan importante para el proyecto del presidente Kirchner con las próximas elecciones”.
La presencia de la candidata en una convocatoria realizada por Brasil fue, también, un guiño hacia Luiz Inácio Lula da Silva. El fundador del PT está en problemas tras la denuncia de pagos ilegales en el Congreso. Cuidadosa, Cristina Kirchner se negó a hablar ante los periodistas sobre el panorama político que enfrenta Lula. “No se abordaron temas particulares como el de la situación institucional de Brasil”, aclaró. Su única referencia a Lula fue la mención del Acta de Copacabana, por medio de la cual Lula y Kirchner se comprometieron a apoyarse en la negociación ante el Fondo y demás organismos. Aquella vez, Kirchner esperaba un mayor compromiso de Lula en el tema, que no se produjo.
Cristina concentró la mayor parte de las preguntas y del tiempo de las exposiciones. Entonces anticipó uno de los objetivos políticos de la visita de Stiglitz: ubicar el caso argentino como un ejemplo opuesto al del Consenso de Washington. Para eso se privilegiará la renegociación de la deuda externa con los acreedores privados, que incluyó una quita del 75 por ciento en el valor nominal. No tanto la deuda con el FMI y los demás organismos de crédito, que el Gobierno está pagando con prolijidad. “Cuando Argentina refinanció su deuda externa pagando el 25 por ciento, lo hizo porque comprometer un mayor pago hubiese significado acrecentar la desigualdad social en el país”, explicó la candidata.
El Consenso de Washington proponía tres pilares básicos para América latina. Inspirados en la ortodoxia neoliberal, los gurúes presionaban para que los países de la región adoptaran políticas de solvencia fiscal, apertura comercial y privatizaciones. El gobierno de Carlos Menem fue un alumno perfecto. En el caso de Kirchner, sus miembros plantean que es bien diferente. “La Argentina puede ser vista como un modelo absolutamente alternativo a las políticas del Consenso de Washington”, subrayó la candidata. Y recordó el ahorro de 67 mil millones de dólares en la negociación con los bonistas. De las tres ideas básicas del Consenso de Washington hay una en la que el Gobierno no puede mostrarse tan alternativo, el superávit fiscal. Está haciendo un ahorro importante en ese aspecto.
En la comida se analizaron problemas de institucionalidad de América latina y se recordó que es la región con mayor desigualdad social del planeta. También se habló de la Cumbre Iberoamericana de Mar del Plata. Más tarde, los periodistas extranjeros aprovecharon la oportunidad para hacerle a Cristina la pregunta típica sobre Evita. “Es un ejemplo por sus ideas más que por su condición de mujer”, respondió la candidata.