EL PAíS › DANIEL GLASER, DE ESTADOS UNIDOS AL SENADO
Mimos de parte del Tío Sam
“Aliado estratégico.” Con estas palabras, el secretario adjunto del Tesoro de Estados Unidos, Daniel Glaser, definió ayer la posición de Argentina en la lucha contra el terrorismo. De paso por Buenos Aires, Glaser visitó el Senado y reiteró la preocupación de su país por la situación en la Triple Frontera.
Con apenas 36 años, Glaser es el encargado de coordinar dentro del gobierno norteamericano las estrategias de lucha contra los delitos financieros. Ayer, el funcionario se reunió con legisladores y funcionarios del Ministerio de Justicia y de Cancillería, y mañana tiene previsto conversar con el ministro de Economía, Roberto Lavagna, y con el titular del Banco Central, Martín Redrado.
“Quedó claro que el tema es tomado muy en serio y que se trabaja fuertemente en este punto”, aseguró Glaser ayer, en una conferencia de prensa en la que explicó los motivos de su visita y definió a la Argentina como “aliado estratégico” y “socio muy valioso” en la investigación de las fuentes de financiamiento del terrorismo.
La preocupación de Glaser está centrada en la Triple Frontera. “Hay financiamiento del terrorismo y esto no es algo nuevo. Es un tema que nos preocupa y por el que trabajamos activamente con el gobierno argentino”, aseguró el funcionario. Identificó a Hezbolá como una de las organizaciones terroristas que operan en la zona y señaló a Assad Ahmad Barakat, que ya había sido identificado por las autoridades norteamericanas, como uno de los miembros de la organización que se encarga de estas actividades. “Es un financista terrorista clave en Sudamérica, que ha cometido todo tipo de delitos financieros, que incluyen a sus empresas, para generar fondos para Hezbolá”, explicó.
Glaser planteó el interés de su gobierno en que el Congreso argentino avance en la sanción de una ley que tipifique como delito las actividades de financiamiento del terrorismo. Exhortó a los legisladores a apurar los tiempos para lograr una norma semejante.