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En medio de un acuartelamiento policial en varios puntos de Santa Cruz, el gobernador Sergio Acevedo anunció ayer un aumento presupuestario para los uniformados. De esta manera pretendió superar un conflicto que amenaza con complicar el operativo de seguridad de las elecciones del próximo domingo. Acevedo formuló el anuncio en el acto en el que puso en funciones al nuevo jefe policial, Wilfredo Roque, hasta hace poco jefe regional de la Secretaría de Inteligencia del Estado.
“Hemos decidido que vamos a continuar, como lo hemos hecho a lo largo de estos dos años, con un fuerte proceso de inversión en las partidas presupuestarias de esta institución”, afirmó Acevedo en el acto de asunción de Roque. Además de puntualizar que la provincia pasó de un presupuesto de “55 millones de pesos en el 2003 a uno de 93 millones en el 2005”, destacó que durante su gestión “se equipó con móviles a todas las seccionales, con armamentos y uniformes, ascensos y traslados con todo lo que demanda una policía al servicio de la sociedad”.
El comisario general Roque reemplaza al renunciante jefe policial Hugo Llamazares, quien dimitió semanas atrás a pedido del gobernador Acevedo, luego del incidente en el que custodios de la seguridad del hijo del presidente Néstor Kirchner aparecieron involucrados en un hecho de violencia con un comerciante local. Roque cuenta en su legajo haber sido jefe de la policía de Santa Cruz cuando el Néstor Kirchner fue gobernador de la provincia. Antes de asumir en su nuevo puesto, el funcionario presentó su renuncia como miembro de la SIDE.
Por el acuartelamiento, el gobierno provincial convocó a unos 200 efectivos de la Gendarmería Nacional para vigilar entidades bancarias en distintas ciudades de Santa Cruz. Acevedo remarcó que “en el presupuesto del 2006 (que ingresará este mes a la Legislatura) fijamos una pauta salarial con un piso del 10 por ciento para toda la administración pública”. Luego de reivindicar que no debe haber islas salariales, Acevedo convocó al diálogo, respetando el orden y las jerarquías”. El nuevo jefe policial se comprometió a reunirse con los mandos superiores y con los acuartelados.