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Es inminente la liberación de Mohamed Alí Seineldín y Enrique Gorriarán Merlo. El Gobierno confirmó a Página/12 que ya tiene a la firma el decreto que en los próximos días le permitirá al ex militar carapintada y al ex guerrillero abandonar la prisión. “Ya hemos reunido consenso con distintos sectores y sólo falta que Duhalde determine el día”, señaló a este diario uno de los funcionarios de mayor confianza del Presidente.
El expediente que beneficia a Seineldín y Gorriarán Merlo ya cumplió con todo el circuito formal. Pasó por los ministerios de Defensa, donde se plasmó la argumentación de la medida, y de Justicia, donde se le dio encuadre legal. Con esos dos dictámenes, llegó a las manos del secretario de Legal y Técnica, Daniel Arcuri.
El funcionario terminó de darle forma al decreto esta semana y ahora sólo resta el guiño de Eduardo Duhalde. Con su firma y la de los ministros de Justicia, Jorge Vanossi, y de Defensa, Horacio Jaunarena, los dos detenidos recuperarían la libertad antes de que finalice la primera fase del Mundial de Fútbol, el próximo viernes.
La referencia a la competencia de Corea-Japón no es casual: anoche se especuló que hoy mismo podría producirse al anuncio de los indultos. Sería para amortiguar el impacto de la noticia con otra que mantiene expectante a la mayoría de los argentinos: el partido que esta mañana mantendrá la selección de Bielsa con la de Inglaterra.
Sin embargo, fuentes de la Presidencia de la Nación negaron que la medida fuera a producirse al menos durante los próximos 3 días. “Este fin de semana raramente pase algo”, aseguró a Página/12 uno de los laderos de Duhalde.
En los últimos meses los contactos informales del duhaldismo con la cúpula de las Fuerzas Armadas fueron continuos. Los militares no presentaron mayores reparos. Es más, hubo un pedido del Consejo Supremo de las fuerzas aconsejando la conmutación de Seineldín.
“Donde realmente encontramos resistencia es entre los familiares de los muertos de La Tablada”, señalaron en la Casa Rosada, en alusión al copamiento del cuartel, que Gorriarán Merlo coordinó en enero de 1989.
En Gobierno hace tiempo que vienen preparando el terreno para anunciar la medida. Por caso, durante un agasajo que ofreció a los periodistas en el Aeroparque, Jaunarena dijo ayer que el indulto constituiría una “medida prudente”. La misma expresión había utilizado una semana atrás cuando en un reportaje se refirió al tema.
Una explicación más política surgió, curiosamente, desde los tribunales de Comodoro Py. Según un juez federal, que tuvo especial protagonismo el año pasado, evaluó que a Duhalde le “entusiasma” la idea de un Seineldín en la calle hablando pestes de Carlos Menem.
Por ahora, el ex líder carapintada dice no saber absolutamente nada, más allá de los comentarios periodísticos, de la suerte que le deparará el destino. Aun así no tuvo empacho a la hora de anunciar cuáles serán los primeros pasos que realizará en caso de recuperar la libertad. “Lo primero es empezar a trabajar, porque hay deudas; y lo segundo, tengo que apartarme un poco de todo esto de los últimos tiempos (en relación con las intervenciones políticas), así me reacomodo a la vida normal”, dijo a la radio.
Si bien el texto del decreto está guardado bajo siete llaves, el ex carapintada conseguiría una reducción de la pena, a través de lo que técnicamente se conoce como “conmutación”. Seineldín cumple una condena de reclusión perpetua.
El caso de Gorriarán sería distinto. Para el ex jefe del Movimiento Todos por la Patria se aplicaría un indulto. No se trata de una reducción de la pena sino directamente de un perdón. Algunas versiones indican que el ex guerrillero está muy enfermo y sería beneficiado por razones humanitarias. Originalmente se anunció de manera extraoficial que la buena nueva para Seineldín y Gorriarán se iba a conocer el pasado 25 de mayo. No obstante, por esa fecha, Duhalde tenía abiertos demasiados frentes de tormenta, que se podrían reducir en la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional por estar lejos de cumplir con todas sus exigencias.
Según la versión que dieron ayer muy pero muy cerca del Presidente, el escenario habría mejorado desde entonces, sobre todo con la inminente llegada al país de la misión negociadora del FMI.