EL PAíS › DIFERENCIAS ENTRE LOS CANDIDATOS DE DERECHA
Muchos caciques y poca tribu
Sobisch convocó a una reunión entre referentes de derecha. La convocatoria resultó tan fallida que ni él fue. El mapa de las broncas cruzadas: Macri, López Murphy, Bullrich, Natale, Bussi.
Por José Natanson
Patricia Bullrich y Mauricio Macri no quieren saber nada con el partido de Antonio Domingo Bussi, o con el de Luis Patti. Ricardo López Murphy sólo tiene en claro que quiere ser candidato, y no está convencido de las ventajas de formar una coalición con el resto de las agrupaciones. El Frente Federal, integrado por una docena de partidos y partiditos provinciales, está dividido: algunos proponen llevar a López Murphy y otros buscan un candidato propio. Con tantas internas, no es raro que la reunión de ayer, en la que la centroderecha tenía previsto avanzar en la formación de un espacio en común, haya fracasado ante la ausencia de sus principales referentes.
El encuentro iba a realizarse a las 9 de la mañana en un salón del Congreso, pero no hubo quórum: López Murphy y Macri pusieron la clásica excusa de la agenda cargada; Bullrich, por su parte, sostuvo que nunca fue invitada y que toda su energía está dedicada a la construcción de su partido y su propuesta de gobierno. Cuando se enteró de la deserción de sus eventuales socios, el gobernador neuquino Jorge Sobisch, organizador del encuentro y líder del Frente Federal, también optó por el faltazo.
Finalmente, la reunión convocada para que las diferentes fuerzas unifiquen sus posiciones se redujo a un deslucido encuentro de los equipos técnicos.
El fracaso del cónclave se explica por las internas cruzadas entre los diferentes partidos. Algunas tienen un tono más bien ideológico, como la que se desató esta semana, cuando Bullrich dijo que su agrupación y su propuesta no tenían “nada que ver” con Fuerza Republicana. Indignado, Ricardo Bussi, el hijo del ex dictador, le respondió que él tampoco tenía previsto aliarse con ella. “Es una ex montonera”, replicó.
Ayer, Macri se sumó a la ex ministra de Trabajo. Aunque se mantuvo en silencio, sus voceros aseguraron que la idea no es articular su candidatura a jefe de Gobierno porteño con el primero que se ofrezca. “Vamos a elegir cuidadosamente nuestros aliados”, explicó la fuente.
No se refería sólo a Bussi, sino también al Partido Unidad Federal (Paufe) que lidera el ex comisario acusado de torturas Luis Patti.
Así, Macri descartó las versiones que indicaban un armado electoral que lo llevaría a él como candidato porteño y al intendente de Escobar como postulante a gobernador.
Desde luego, el principal problema pasa por la definición de la fórmula presidencial. La idea más ambiciosa es disputar una interna abierta entre Bullrich, López Murphy y el candidato del Frente Federal, de modo tal de instalar sus figuras y consolidar un espacio en común.
Sin embargo, hasta el momento no hubo un acuerdo concreto y, mientras tanto, cada uno sigue con sus propios planes. Bullrich está cerca de convertir a su fuerza política, Unión por Todos, en un partido nacional, y buscará ir instalando sus propios candidatos. Ayer aseguró que la semana próxima presentará, además de su compañero de fórmula, a su candidato para la jefatura de Gobierno porteño. Aunque insiste en mantener el misterio, todo indica que el elegido es el joven ex ministro de Turismo de De la Rúa, Hernán Lobardi.
Uno de los principales obstáculos para avanzar en la integración es que López Murphy no se decide a pelear una interna abierta. Un poco porque se ve a sí mismo como la figura más fuerte y, por lo tanto, el “candidato natural” del espacio, y otro poco porque está esperando que madure un acuerdo con Sobisch.
En el Frente Federal tampoco se ponen de acuerdo. Algunos, como los demócratas mendocinos o el Movimiento Popular Neuquino que lidera Sobisch, quieren llevar a López Murphy como candidato presidencial. Otros, en cambio, proponen presentar una fórmula encabezada por el demoprogresista santafesino Alberto Natale para disputar con los dos ex ministros de Fernando de la Rúa la interna abierta. “Nos vamos a poner de acuerdo porque sería absurdo no hacerlo. Pero todavía falta”, resumían ayer cerca de López Murphy.