La empresa italiana Sacmi, una de las acreedoras de la fábrica neuquina de cerámicos Zanon, apeló en la Justicia argentina la resolución que decidió prorrogar desde octubre pasado y por tres años la posibilidad de producir y vender material cerámico a los 470 obreros cooperativizados bajo el nombre de Fábrica Sin Patrones (Fasinpat). La fiscalía general hizo lugar al pedido desde Italia y propuso a los jueces de la Sala E de la Cámara de Apelaciones en lo Comercial de Buenos Aires que se acorte a dos años el plazo de prórroga a los obreros neuquinos. Los trabajadores temen que, si la resolución final es darles la razón a los acreedores de la ex Cerámica Zanon, se dé por terminada la gestión obrera que comenzó en octubre del 2000 y se ordene el inmediato desalojo de la fábrica. Además de declararse en estado de movilización y alerta –como vienen haciendo desde hace más de siete años–, los ceramistas reclaman de una vez por todas lo que consideran la solución de fondo al conflicto: la expropiación y estatización de la mayor fábrica de porcelanato de América latina.

Los representantes en la Argentina de la empresa Sacmi son los que proveen de maquinaria a la mayor parte de la industria del cerámico en nuestro país. “Lo que la firma Sacmi plantea de fondo es que se tiene que terminar con la experiencia obrera de la ex Zanon en Neuquén y que se tiene que proceder al remate de todos los bienes de la fábrica. Por supuesto, previo desalojo”, dijo a Página/12 Mariano Pedrero, abogado del medio millar de trabajadores que, bajo gestión obrera, mantienen hace casi seis años en producción a Zanon.

La respuesta a este planteo judicial no tardó en ser respondida por los propios ceramistas. “Siempre hemos tenido aprietes. Si no es la crisis económica es la energética, como ahora. Así que tomamos esto con mucha preocupación, pero queremos que todos sepan que el posicionamiento político de cada compañero y cada compañera es defender la gestión obrera cueste lo que cueste. Porque ahí se nos ha ido la vida. Son seis años de lucha y sin ninguna respuesta”, dijo a este diario Alejandro López, secretario general del gremio ceramista en Neuquén. “Somos conscientes de que a muchos les molesta muchísimo que sigamos produciendo y generando puestos de trabajo, porque de alguna manera estamos demostrando que se puede gestionar desde los propios obreros una fábrica tan inmensa como Zanon”, agregó.

“En estos años hemos tenido reuniones con (Oscar) Parrilli, con Alberto y Aníbal Fernández. Incluso, la última vez que vino el Presidente a Neuquén, le llevamos una notificación para pedir una audiencia... La gente del Gobierno nos dijo que nos iban a atender, pero no pasó nada. Sigue estando nuestro proyecto de expropiación y estatización en el Congreso nacional y también en la Legislatura de aquí, pero en ambos lados no hemos tenido ningún tipo de respuesta a nuestro reclamo”, finalizó el dirigente ceramista.

Finalmente el letrado Pedrero adelantó que se prepara una presentación para después de la feria judicial, “denunciando que atrás de esta presentación de Sacmi en realidad está la familia (de Luigi) Zanon”. “Entre Sacmi y Zanon hay un pacto, ya que al mismo tiempo que Sacmi intenta argumentar su discurso a partir de que quiere cobrar su deuda, acaba de perdonar a Luis Zanon una deuda de 13 millones de pesos. Allí se demuestra que ambas empresas son parte de lo mismo.”