En el marco del juicio al ex capellán de la Policía Bonaerense Christian von Wernich, tres testigos reconocieron el centro clandestino de detención que funcionaba en el Destacamento policial de Arana, en las afueras de La Plata. Durante su cautiverio, Eduardo Kirilovsky, José Llantada y Liliana Zambano fueron torturados reiteradamente en ese lugar, que recorrieron ayer durante una hora como parte de la inspección ocular que se realiza a los centros del denominado “Circuito Camps”.

Se espera que luego de los alegatos de la querella, que se harán el 8 de octubre, y de la defensa, el 9 de octubre, se dicte –ese mismo día–- sentencia sobre el primer integrante de la Iglesia Católica en ser juzgado por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar.

“Nos llevaban al campito”, contó Llantada durante la etapa de audiencias. Secuestrado en julio del 1977, era trasladado de la Brigada de Investigaciones hasta la calle 637 y 131, en La Plata, para ser interrogado y torturado. A treinta años de esos hechos, volvió a relatar su experiencia desde el propio lugar donde fue picaneado. “Durante la inspección escuchamos las expresiones de los testigos y, si bien hay modificaciones con respecto a cómo estaba hace 30 años, hemos escuchado las vivencias de los testigos en ese lugar”, contó uno de los miembros del tribunal, el juez Horacio Isaurralde. Nilda Eloy, integrante de la Asociación Ex Detenidos-Desaparecidos, reiteró su reclamo para que cese este tipo de reconocimientos porque “revictimiza” a los testigos. Antes de los alegatos todavía se espera que se inspeccionen el centro Coti Martínez, Puesto Vasco y El Pozo de Quilmes.

El fiscal de la causa, Carlos Dulau Dumm, reclamó que se acelere el desalojo de vehículos y autopartes del destacamento para que el Equipo Argentino de Antropología Forense pueda investigar la existencia de fosas comunes. La medida la había ordenado el juez Arnaldo Corazza en julio pasado, pero la Fiscalía de Estado todavía no completó la tarea. “Se presume que en el lugar podrían existir cadáveres de gente que fue desaparecida”, aseguró el fiscal Dulau Dumm.