“Va a haber una participación amplia de todos los sectores. Por supuesto que también está incluido el movimiento obrero.” Hugo Moyano conversa con los periodistas en el bunker de Néstor Kirchner, en Puerto Madero. Acaba de reunirse con el ex presidente por más de cincuenta minutos. Página/12 le pregunta por su posible nombramiento como vicepresidente del PJ normalizado por Kirchner. “No sería correcto hablar de cargos en este momento. Eso se definirá cuando estemos más cerca de la conformación del Consejo Nacional. A veces estas decisiones se hacen una hora antes”, responde con una sonrisa. Distendido, camisa blanca y sin colaboradores a la vista, Moyano dice que el justicialismo tendrá cuatro vicepresidencias. Luego confirma que el matrimonio presidencial asistirá al festejo por sus veinte años al frente de Camioneros. Será el 4 de marzo, en la cancha de Deportivo Español. Cuenta que Kirchner le confirmó que el nuevo PJ se afiliará a la Internacional Socialista. “El peronismo tiene una identidad muy fuerte, muy arraigada, pero creo que sería muy bueno”, opina.

–¿Hubo un ofrecimiento para que la CGT ocupe cargos en el PJ?

–Hablamos de la reorganización del partido. Hay coincidencias en la necesidad de una participación amplia de todos los sectores, por supuesto que también está incluido el movimiento obrero. Se va a realizar una reorganización del justicalismo en todo el país para darle el protagonismo que hasta ahora órganicamente no tuvo. A partir de la normalización del partido se van a crear otros lugares para darle participación a la producción, al trabajo, a todo lo que tenga que ver con mejorar los sectores produtivos y las condiciones de vida de los trabajadores.

–¿Habrá un lugar para las 62 Organizaciones?

–Hablamos del movimiento obrero peronista, que está identificado con la CGT. Va a haber participación de todos aquellos hombres y mujeres que tengan condición de peronistas. Pero también van a estar otros sectores que acompañaron en muchas oportunidades al justicialismo. Esos van a componer el movimiento. El movimiento es mucho más amplio que el partido.

–En el 2003 usted apoyó a Adolfo Rodríguez Saá. ¿Cree que tanto él o su hermano deberían presentar una lista en el PJ?

–No sé cuál va a ser su actitud, pero si él cree que está en condiciones de hacerlo y hacer un papel decoroso me parece que tiene todas las posibilidades de hacerlo. Ahora, no me cabe duda, y esto no lo digo yo solamente, que la adhesión que tiene el compañero Kirchner para la presidencia del partido es casi unánime. Tiene un porcentaje altísimo. Tendría muy pocas posibilidades aquel que presente otra lista.

–¿Habló con Kirchner de los cambios que se harán a la carta orgánica del partido en el congreso del 7 de marzo?

–Hablamos de la cantidad aproximada que va a tener el consejo nacional. Se va a reducir y quedará entre 41 o 50 miembros. Las vicepresidencias del partido van a ser cuatro. Todavía está todo por decidir, por discutir. Lo más importante es la decisión de seguir conversando.

–Desde tiempos de Menem el peronismo forma parte de la Internacional Demócrata Cristiana, una coalición de centroderecha. ¿Qué opina de que ahora vaya a inscribirse en la Internacional Socialista? ¿O debería quedarse donde está ahora?

–No, donde está no porque ahí está el partido de la Thatcher, de los republicanos. Es una mezcla de toda la derecha. Son los que deciden las politicas y los modelos económicos que nos llevaron al desastre en la década del 90. En ese lugar no podemos estar. En lo otro sí. El ex presidente me comentó que deberíamos estar donde están aquellos partidos con cuyos gobiernos hay una relacion muy importante, como es España, donde gobierna el socialismo. De cualquier manera el peronismo tiene una identidad propia muy arraigada, muy fuerte. Pero creo que sería muy bueno salir de esa Internacional donde nos metió el ex presidente Menem.

La sala de conferencias del cuarto piso de Olga Cossettini 1553 tiene un televisor que transmite todo el tiempo el canal de noticias C5N. Por la pantalla acaban de mostrar una protesta de hinchas de Racing frente al Congreso. Confeso simpatizante de Independiente, Moyano cuenta que cruzó algunas bromas con el ex presidente. Kirchner es fanático de Racing, que no anda precisamente por sus mejores tiempos. Muy distinta es la actualidad de Camioneros. El gremio de transporte sigue siendo uno de los más poderosos a la hora de las negociaciones. Lo reconoce Moyano que no pierde la ocasión para defender el acuerdo testigo del 19,5 por ciento. “Somos concientes que tenemos un poder de pelea y lucha que nos permite conseguir más que otras organizaciones.”

–Hubo algunas críticas por el acuerdo que firmó Camioneros.

–Firmamos el acuerdo que nos pareció lógico. El trabajador nos va a apoyar el 4 (se refiere al acto en Deportivo Español). Yo jamás critico el acuerdo de nadie, por alto o por bajo. Por eso nadie tiene el derecho a criticar nuestro acuerdo. Nosotros sabemos lo que nos conviene. Sabemos que los salarios más bajos de nuestro gremio son altos. Y tenemos algunas dificultades. No quiero decir otras cosas.

–Lo que es seguro es que Kirchner y Cristina se pusieron contentos.

–Los dirigentes tenemos que tener la responsabilidad de saber hasta dónde podemos ir. Porque si no pasa lo mismo que en 1975. Yo recuerdo que (Rogelio, dirigente de la construcción) Pamagno fue a festejar a la Plaza de Mayo porque había logrado un 60 por ciento de aumento. Y fue a agradecerle a Isabel. A las semana la UOM firmó por el 110 por ciento y después firmó el SMATA algo mucho más alto. Si no tenemos en cuenta esa experiencia para no volver a repetirla entonces no aprendimos nada.