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Un centenar de manifestantes, en su mayoría desocupados que exigían el pago de planes de empleo, retuvieron en la Municipalidad de Bariloche por varias horas a un grupo de funcionarios y provocaron destrozos en la sede de la intendencia, tras agredir al jefe comunal Atilio Feudal y herir a dos bomberos que trataban de apagar un principio de incendio.
Los beneficiarios de los planes de empleo provincial tomaron durante la mañana la mañana el edificio de la municipalidad y retuvieron en su interior al secretario de Gobierno, Roberto Marino, a los concejales Walter Arneodo y Alberto Icare, así como la presidenta del Concejo, Graciela Di Biase, exigiendo la presencia del intendente radical.
Feudal apareció a las cuatro de la tarde y mantuvo un corto diálogo con los manifestantes hasta que uno de los operarios lo golpeó. Según algunos testigos, el jefe comunal intentó sacarle un palo a una mujer, lo que desató una pelea. Mientras volaban sillas y muebles varios de la sala de prensa, el intendente fue sacado del lugar bajo custodia policial. Detrás de ellos, los manifestantes apedrearon la sede comunal y arrojaron gomas en llamas hacia el interior del Centro Cívico. En medio de los disturbios dos bomberos resultaron heridos por piedras que les arrojaron los manifestantes y la planta baja de la intendencia prácticamente destrozada.
La tranquilidad volvió recién por la noche, cuando el juez Héctor Leguizamón Pondal actuó de mediador y ofreció al centenar de manifestantes la entrega de bolsas de comida. El magistrado se comprometió asimismo a hablar con los concejales para garantizar el cobro de los planes de empleo adeudados.
Los manifestantes se retiraron pacíficamente frente al Centro Cívico donde permanecerán hasta que el cobro de los subsidios se haga efectivo.