Si algo podía desacoplar la suerte del mercado local de los vaivenes internacionales era el anuncio de ayer. No bien la presidenta Cristina Fernández de Kirchner manifestó la intención de hacer una oferta a los inversores que quedaron fuera del canje de 2005, los bonos y las acciones despegaron del contexto mundial y permitieron holgadas ganancias que fueron tomadas sobre el final. Tras haber subido 5 por ciento, el MerVal cerró con una mejora de 1,7 por ciento. El anuncio, en tanto, benefició en mayor grado a los bonos locales, que avanzaron un 4 por ciento en promedio. Esto redujo el riesgo país argentino 43 unidades, a 763 puntos básicos. Finalmente, el dólar retomó su tónica vendedora y las ofertas superaron ampliamente la demanda, lo que permitió una baja en el dólar mayorista a 3,10 pesos. Al público, finalizó en los mismos valores a los que despidió la semana, 3,13 pesos. La situación le dio margen al Banco Central para incorporar reservas a sus arcas, y el stock cerró ayer en 47.082 millones de dólares.

Cristina dijo ayer en Nueva York que el gobierno argentino recibió una propuesta de tres bancos para normalizar la deuda incumplida por unos 20.000 millones de dólares. El programa, presentado por los bancos Deutsche Bank, Citi y Barclays, consta de dos partes complementarias: la renegociación de la deuda de los acreedores que no ingresaron al canje y la refinanciación de los préstamos garantizados (PG) con vencimiento en 2009 y 2010.

Los mercados locales reaccionaron en positivo. El índice de acciones de empresas líderes finalizó con un alza de 1,7 por ciento, hasta los 1690 puntos en la bolsa local. El volumen de negocios se limitó a 77 millones de pesos. El MerVal se comportó errático durante las primeras tres horas de rueda, pero, pasadas las 14, el anuncio oficial llevó los papeles a una ganancia de más de 5 por ciento. Los papeles de Grupo Financiero Galicia y de los bancos Patagonia, Hipotecario y Francés reaccionaron con una suba de casi 10 por ciento.

No obstante, las pérdidas heredadas de Wall Street recortaron ese alza a la mitad. El mercado local tuvo ayer que enfrentar una toma de ganancias en exterior, una fuerte caída del dólar, producto del alto déficit que implicaría la medida para el gobierno estadounidense, y la consecuente suba en los precios de los commodities. “El anuncio es positivo por varios puntos: llega en buen momento, teniendo en cuenta la fuerte caída que acumulan los bonos, y demuestra el deseo de bajar su costo de financiamiento al reabrir los mercados”, según explicó un analista de Compañía Inversora Bursátil.

Sin embargo, el anuncio recayó –como era de esperar– con mayor fuerza en el mercado de títulos públicos. El Boden 2012 subió 6 por ciento, mientras que el Descuento en pesos avanzó 3 por ciento. Según fuentes del Gobierno, la propuesta que se podría llevar a adelante para los holdouts contempla únicamente la opción de la serie en dólares del Descuento. Ayer, ese papel recuperó 2 por ciento en su cotización. El resultado de la operatoria llevó a disminuir sus índices de riesgo: el EMBI disminuyó a 767 puntos.

En el mercado cambiario, la posibilidad de reapertura del canje, que se anunció en la última media hora de rueda, hizo que los operadores cambiaran su estrategia y comenzaran a vender posiciones en dólares. La ola de ventas hizo retroceder en ese tiempo la cotización más de un centavo y medio. De un mercado con fuerte demanda de dólares, que llevó su precio el viernes pasado a 3,118 pesos, cerró ayer ofrecido (más ofertas que demanda) en 3,10 pesos. “Hubo una clara reacción vendedora por parte de los inversores, luego de darse a conocer la información referente a la oferta de los tres bancos para resolver la situación de los bonistas”, confirmó a este diario el responsable de la mesa de cambios Puente Hnos., Carlos Lizer. La baja no llegó al precio del dólar al público, que se mantuvo en 3,13 pesos, aunque en varias agencias de cambio del microcentro porteño se llegó a pedir un centavo menos.