Horas antes del arribo de la presidenta Cristina Fernández a Cuba, Hilda Molina se mostró escéptica respecto de sus posibilidades de viajar a la Argentina para reencontrarse con su hijo y conocer a sus nietos. Si bien consideró que Cristina “hará algún tipo de gestión”, Molina expresó ayer “tengo pocas expectativas, creo que no habrá ninguna respuesta”. La médica disidente volvió a criticar al gobierno de la isla. “No puedo crearme falsas ilusiones conociendo al gobierno cubano. Me parece que, al final de todo esto, el gobierno va a lograr como siempre su objetivo. Yo sé que hay un ensañamiento, en especial en este caso, un escarmiento”, cuestionó la neurocirujana. A contramano de su madre, el también médico Roberto Quiñones fue optimisma: “Como dice mi madre, somos realistas, pero yo tengo fe en la gestión de la Presidenta. Son corazonadas que uno tiene”.