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El juez federal Claudio Bonadío desestimó ayer la denuncia contra Cristina Fernández y Néstor Kirchner por supuesto enriquecimiento ilícito originado en la compra, en octubre de 2008, de dos millones de dólares. En un escrito de dieciséis carillas, el magistrado concluyó que los hechos denunciados no constituyeron delito; compartió así el criterio del fiscal Gerardo Di Massi, quien días atrás había solicitado la desestimación de la causa contra la Presidenta y su esposo.

La jefa de Estado y el ex presidente habían sido denunciados en febrero por los diputados de la Coalición Cívica Juan Carlos Morán, Elsa Quiroz y Patricia Bullrich. Según los legisladores, los Kirchner debían ser investigados por “enriquecimiento ilícito por aprovechamiento de información privilegiada”.

El centro de la argumentación de los diputados que responden a Elisa Carrió fue que el matrimonio Kirchner adquirió los dólares contando con información privilegiada acerca de que el precio iba a subir. El artículo 268 del Código Penal contempla que se castigue “al funcionario público que con fines de lucro utilizare para sí o para un tercero informaciones o datos de carácter reservado de los que hayan tomado conocimiento en razón de su cargo”. Recientemente, y para evitar el archivo de la causa, los legisladores de la Coalición Cívica habían presentado una ampliación de la denuncia.

En su defensa, Kirchner sostuvo haber comprado los dólares para pagar un paquete de acciones del hotel Alto Calafate y señaló también que en la Argentina las operaciones inmobiliarias no se realizan en pesos, sino que se utiliza la moneda norteamericana. En el mismo sentido, el ex presidente agregó que utilizó el dinero en forma inmediata, por lo que “no hubo beneficio cambiario”.

El fiscal Di Masi pidió informes al Banco Central sobre la operación y la declaración jurada de los Kirchner y en base a esos documentos concluyó que no hubo delito y pidió la desestimación de la denuncia.

En su dictamen, el representante del Ministerio Público señaló que, según las disposiciones del Banco Central, “el monto máximo para la adquisición de dólares estadounidenses era de dos millones –a partir de noviembre de 2008–, por lo que hasta dicha cantidad no hay ningún inconveniente para hacerlo y que incluso, superado, en la medida que se informe al BCRA tampoco lo hay”.

Ayer, al desestimar la demanda, el juez Bonadío citó además otro dictamen fiscal, el de una causa iniciada por el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zanini, contra el ex titular del Banco Central, Martín Redrado, también por el tema de la compra de dólares por parte de funcionarios. En ese expediente, recordó el magistrado, “el fiscal Patricio Evers sostuvo que la adquisición de moneda extranjera no era per se delictiva, en la medida que se cumpla con la normativa elaborada por la Autoridad Monetaria”.

De todas maneras, el juez Bonadío utilizó un argumento formal para dictar el archivo de la causa abierta contra el matrimonio Kirchner. Sostuvo que el fiscal “conserva la facultad de desestimar una investigación por inexistencia de delito (...) y de instar el sobreseimiento. Por ello que frente a un pedido fiscal de archivo por inexistencia de delito, el juez se encuentra impedido, no sólo de instruir al fiscal a requerir la instrucción, sino –antes bien– de conocer y decidir el asunto”, concluyó.