El próximo funcionario PRO que falte a la Comisión Investigadora Especial (CIE) de las escuchas podría ser llevado, en una segunda oportunidad, por la Policía Federal. Esto desató la ira de los legisladores macristas, que vienen intentando trabar el funcionamiento de la CIE. La mayoría le apuntó al juez Roberto Andrés Gallardo, quien habilitó el procedimiento, por el que –de ahora en más– la CIE le enviará la lista de testigos al juez de turno y éste los convocará bajo la admonición de que pueden ser llevados por la fuerza pública. Para Gallardo, se trata de “un pedido urgente de asistencia judicial a efectos de poder cumplir el mandato popular oportunamente otorgado” y cita el fallo del TSJ sobre el “conflicto de poderes” como fundamento para prestar asistencia a la Legislatura. “El juez Gallardo no tiene facultades para hacer comparecer testigos en Comisión Investigadora”, interpretó en una larga cadena de mensajes enfurecidos el legislador porteño Helio Rebot. Los macristas, sin embargo, tendrán problemas para apelar la medida, dado que sólo pueden hacerlo los que sean afectados por ella: es decir, los testigos.