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Para que la tarea de los legisladores argentinos que viajaron a Washington no sea tan pesada, su agenda incluye dos actividades curiosas. Luego de sus entrevistas protocolares con funcionarios norteamericanos para definir el texto de los proyectos de modificación a las leyes de quiebras y subversión económica –que reclama con insistencia el FMI– el presidente provisional del Senado, Juan Carlos Maqueda, los senadores Raúl Baglini (UCR) y José Alperovich (PJ); y los diputados Horacio Pernasetti (UCR) y Miguel Angel Toma (PJ) irán a escuchar a Fito Páez. El plan continúa por la noche en la “residencia del Sr. Embajador” con la “inauguración del Smiling-Pizza Club”. Una vez bailados y comidos, no se sabe qué estrategia seguirán los legisladores argentinos para negociar. Si les dirán “yo vengo a ofrecer mi corazón”, pensarán que “es sólo una cuestión de actitud” o invitarán a los norteamericanos con un “vení a ver el Fuerte Apache, a ver qué sentís”.