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La Cámara Federal ordenó que un joven inscripto como hijo de un ex agente penitenciario de la última dictadura sea sometido a un análisis de ADN en el Hospital Durand, la institución habilitada por ley para actuar como perito en las causas en las que se investiga la apropiación de menores durante la última dictadura. El joven se realizó estudios en un laboratorio privado, pero las Abuelas de Plaza de Mayo solicitaron que el análisis se repita con los requisitos que marca la ley. Los jueces Horacio Cattani, Martín Irurzun y Eduardo Luraschi estuvieron de acuerdo con el planteo y anularon el estudio genético anterior. Las Abuelas de Plaza de mayo sospechan que el joven anotado como hijo propio por un ex agente de Inteligencia del Servicio Penitenciario Federal que actuó en el centro clandestino de detención “El Vesubio” y su mujer es en realidad hijo de una pareja desaparecida. “No se advierte que la diligencia ordenada resulte desproporcionada cuando el propio (joven) no opuso reparo para realizarse un estudio similar”, señalaron los jueces.