Miércoles, 20 de septiembre de 2006 | Hoy
En términos diplomáticos, Kirchner mostró sus preferencias por el líder del PT para las presidenciales brasileñas. Un discurso contra la guerra.
Por F. C.
Desde Nueva York
“Un triunfo tuyo ayudaría a consolidar el Mercosur”, fue la fórmula que encontró el presidente Néstor Kirchner para demostrar sus ganas de que Luiz Inácio Lula da Silva consiga su reelección en las elecciones brasileñas del 1º de octubre. Como suelen hacer cada vez que coinciden en algún gran encuentro alrededor del mundo, Kirchner y Lula se reunieron para dar muestras del buen momento de su vínculo personal y recordar la relación estratégica de los dos socios principales del Mercosur. Pero además de la foto, en esta ocasión estuvo el condimento político dado por la última salida al exterior de Lula antes de los comicios, en los que todo indica que ganará con amplitud en primera vuelta.
Aunque sus simpatías son obvias, Kirchner como presidente argentino tiene que guardar cierta objetividad sobre las cuestiones de la política interna de Brasil. Por eso la fórmula de que el triunfo de Lula “ayudaría” al Mercosur. “Es que venimos trabajando bien en estos últimos tiempos. Tenemos un gran cariño por el presidente Lula y queremos que le vaya muy bien”, abundó luego el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
La reunión duró sólo unos pocos minutos. Lula ya había hablado ante la Asamblea General. Los presidentes se encontraron en un salón lateral, al que no tenía acceso la prensa ni los funcionarios no autorizados. Fuera de la campaña electoral, uno de los temas obligados fueron los discursos que acababan de escuchar en la apertura de la ONU. El mensaje de Lula fue muy elogiado por los argentinos. El brasileño, como es su costumbre, puso énfasis en el tema social pero este año le agregó un fuerte acento en contra de la guerra. “La guerra nunca puede brindar seguridad. La guerra sólo puede generar amargura, intolerancia, fundamentalismo y las dañinas estructuras de las actuales hegemonías”, sostuvo Lula, en un discurso que fue muy aplaudido.
Por ser el primer país que adhirió a la carta de nacimiento de las Naciones Unidas, a Brasil siempre le toca el primer discurso después del secretario general. Tiene la ventaja de ser muy escuchado, con los lugares correspondientes a las delegaciones todavía completos. Los argentinos felicitaron a Lula y, en cambio, todos se mostraron alarmados por las palabras de George Bush, quien siguió en el estrado al brasileño. “No puede ser, no disimuló ni un poco que se cree el dueño del mundo”, se asombraba uno de los miembros de la delegación argentina. Bush se refirió uno por uno “al pueblo de” Irak, Afganistán, Líbano, Irán, Siria y Darfur, en Sudán. A diferencia del tono social de Lula, Bush fue monotemático en cuanto a las cuestiones del terrorismo, la guerra y la seguridad, arrancando con el recordatorio del reciente quinto aniversario del ataque a las Torres Gemelas. “La verdad que metía un poquito de miedo”, decían luego los argentinos. Hoy será el turno de las palabras de Kirchner.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.