Un nutrido grupo conformado por diversas tribus roqueras disfrutaban anoche el recital organizado por Músicos Unidos por el Rock y la FUBA, que amenizó la vigilia por el 20 de diciembre con una larga lista de bandas, con Todos Tus Muertos como número central. Detrás del escenario montado en la Plaza de Mayo, militantes del Partido Obrero acomodaban varias bolsas con chorizos y bandejas de hamburguesas para agasajar a la concurrencia. Hoy, en el acto central en reclamo y recuerdo de las víctimas de la represión del 2001, los roqueros cederán el escenario a los cinco representantes de organizaciones de derechos humanos, de desocupados, sindicales, estudiantiles y partidos de izquierda. Allí se leerá un documento conjunto para pedir, entre otras cosas, la aparición con vida de Jorge Julio López.

Un rato antes del concierto, militantes de distintos gremios y organizaciones sociales enrolados en la CTA se concentraron frente al Congreso, desde donde marcharon hasta la Plaza de Mayo, bajo la consigna “A cinco años que el pueblo se puso de pie para cambiar la historia”. Hugo Yasky, el nuevo líder de la CTA, reclamó el “enjuiciamiento de los responsables” de las 35 muertes que se produjeron el 19 y 20 de diciembre del 2001. Como parte de la CTA, participó de la marcha la Federación Agraria, que mantiene un intrincado conflicto con el Gobierno y se movilizó en varios lugares del país. También los integrantes del Movimiento Libres del Sur y de Barrios de Pie hicieron su homenaje, siguiendo la misma ruta que los gremialistas, aunque más temprano.

Según confirmaron los organizadores, el acto de hoy empezará a las 17 en el Congreso, donde los manifestantes concentrarán durante una hora, para partir luego hacia la Plaza de Mayo. Allí se agregarán dos columnas más que irán por las dos diagonales. La columna principal, que entrará por Avenida de Mayo, tendrá una cabecera común compartida por los referentes de cada agrupación. La bandera que sostendrán es la que reclama, al cumplirse tres meses de su desaparición, la aparición con vida del testigo, querellante y víctima en el juicio que encarceló al genocida Miguel Etchecolatz. Se estima que el acto terminará alrededor de las 20 y se leerá un documento consensuado entre todas las organizaciones convocantes, con críticas y reclamos al gobierno, y un pedido de castigo a los responsables físicos e intelectuales de la masacre de los días 19 y 20 de diciembre de 2001 en todo el país.