Le preguntaron si el primer encuentro con Cristina Kirchner le había parecido “demasiado frío”. “Había mucho aire acondicionado, pero yo no la sentí fría”, chanceó Mauricio Macri, suelto de cuerpo. Alguien, desde el fondo, gritó: “¡¡Cuac!!”. Luego el jefe de Gobierno se despachó contra los maestros que se toman demasiados días de licencia. “Es como cuando dicen que hay nueve mujeres para cada hombre. Y bueno, hay alguno que tendrá 18”, ensayó. Pero faltó el redoble de baterías. “Evidentemente, lo de Mauricio no es el humor”, concilió la vicejefa Gabriela Michetti. Más tarde, el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti, les pidió a los periodistas: “Che, ríanse un poco más de los chistes de Mauricio. En las reuniones de Gabinete, siempre nos reímos: Jo, jo, jo”.