Cuando ganó las elecciones primarias del 2011, la presidenta Cristina Kirchner dijo que estaba “feliz como Riquelme”. Y el vicepresidente Amado Boudou hizo el gesto del Topo Gigio con las orejas, como hacía el jugador cuando festejaba. Ayer en el Mercado Central retomó la imagen del futbolista cuando, en un momento de su discurso, creyó ver en la mirada del secretario de Comercio un atisbo de resignación y reproche: “Moreno –le dijo en broma–, no me mire como Angelici a Riquelme”.