En medio de la conmoción mundial causada por la renuncia de Josef Ratzinger y el nombramiento de Jorge Bergoglio como nuevo papa, todo con las denuncias de corrupción y pedofilia como música de fondo, el famoso grupo de teatro catalán La Fura dels Baus estrenó en la Opera de Lyon Il Prigionero, de Luigi Dallapiccola, adaptada con sentido de la oportunidad. La obra pasó de estar basada en las torturas de la Santa Inquisición a centrarse en los abusos sexuales cometidos por sacerdotes sobre niños. “Reconozco que me he ido lejos en la adaptación –declaró el director artístico, Alex Ollé–, pero el tema es fuerte y completamente actual.”