Alrededor de dos millones y medio de turistas hicieron que el movimiento turístico del combo Semana Santa más Día de la Memoria superara en un cinco por ciento el del festejo religioso de 2007, según los gobiernos provinciales y la Secretaría de Turismo de la Nación. A la ciudad de Buenos Aires arribaron más de 245 mil personas, a Mar del Plata, 200 mil, y a Mendoza, 85 mil. La ocupación hotelera se mantuvo muy alta en todos los destinos, con picos de entre el 95 y el 100 por ciento; los turistas vernáculos gastaron 150 pesos per cápita, por día, y los extranjeros 480. “Esto demuestra el crecimiento del turismo interno, que se afianza a la par de la llegada de extranjeros”, relacionó el secretario de Turismo nacional, Enrique Meyer.

En la ciudad de Buenos Aires, el 93 por ciento de ocupación hotelera fue “record”, promovido por las visitas nacionales, que pasaron en territorio porteño un promedio de cuatro noches, e internacionales, que se quedaron seis. A la cotización actual del dólar, los argentinos gastaron unos 150 pesos por cabeza, mientras que el gasto diario de cada turista internacional arañó los 500. “La industria del turismo es muy importante para la ciudad en términos de ingresos y puestos de trabajo, ya que genera dinamismo en las pymes y flujo de divisas”, consideró el presidente del Ente de Turismo porteño, Hernán Lombardi.

Las cifras se extraen de un informe preliminar de esa cartera, donde se da cuenta de que la ocupación en hoteles de una y dos estrellas creció un 2,3 por ciento; en los de tres y cuatro, un uno por ciento; y en los de cinco se mantuvo constante al respecto de 2007. En perspectiva, el aumento en la contratación de hospedajes porteños creció en el último lustro un 65 por ciento en hoteles de una y dos estrellas. Pero también aumentó el consumo “cinco estrellas”, que pasó de un 70 por ciento de ocupación en 2003 a un 93 este año.

Las habitaciones más baratas fueron ocupadas por argentinos, aunque también por vecinos de países limítrofes, especialmente Uruguay. El resto de los latinoamericanos que visitaron la ciudad se hospedaron en cuartos de tres estrellas, y los europeos se quedaron, a módicos precios, con los de cuatro y cinco estrellas. Para el interior del país, las cifras aportadas por las autoridades son:

- A 20 minutos de la ciudad de Buenos Aires, Tigre recibió al menos 300 mil visitantes, especialmente en la zona del Delta.

- Mar del Plata recibió a más de 200 mil personas, que ocuparon el 90 por ciento de las habitaciones, en especial las de cuatro y cinco estrellas.

- En Mendoza debieron habilitarse casas de familias para albergar a los 85 mil turistas, que significaron un 85 por ciento más que en 2007.

- Neuquén tuvo plena ocupación en Junín de los Andes, un 80 por ciento en Villa La Angostura y un 65 en San Martín de Los Andes.

- A Salta llegaron 63 mil visitantes, un 15 por ciento más que el año pasado, que ocuparon entre el 90 y el 100 por ciento de las habitaciones.

- En Córdoba, la ocupación fue entre un 90 y un 100 por ciento. Además, los visitantes gastaron 200 pesos promedio, frente a los 165 pesos de 2007.

- San Juan recibió a 27 mil personas –60 por ciento más– que gastaron casi 7,5 millones de pesos y ocuparon la plenitud de las plazas hoteleras.

- Por Tucumán pasaron 18 mil turistas. Seis por ciento en alza.

- En Las Grutas, Río Negro, hubo 15.400 visitantes, un 60 por ciento más que el año pasado.

- A Santiago llegaron más de 15 mil, que cubrieron la capacidad hotelera de las Termas de Río Hondo y de la capital provincial.

- Tandil y Sierra de la Ventana, en Buenos Aires, debieron habilitar casas de familia como hospedaje porque colapsaron los hoteles.

- Rosario cobijó a ocho mil turistas y agotó las plazas disponibles.

- A Catamarca llegaron cuatro mil, aunque la mayoría se quedó un día.

- Jujuy tuvo ocupación hotelera total y un 5 por ciento más de visitas.

- En San Luis y La Rioja hubo plena ocupación en los hospedajes.

- Y en Santa Fe, la ocupación de cabañas y hoteles superó el 80 por ciento, aunque “el movimiento turístico mermó por las intensas lluvias”.

Para el secretario de Turismo nacional, Enrique Meyer, “el desarrollo del turismo concebido como una política de Estado está dando sus frutos”.