Brasil sentó ayer en el banquillo a Google. Lo acusa de facilitar la difusión de pornografía infantil en la red social Orkut. Una comisión especial del Senado de ese país, que investiga la difusión de pornografía en Internet, escuchó ayer los testimonios de directivos de Google y de un fiscal que acusa a esa empresa de no colaborar en la lucha contra la pederastia por negarse a facilitar detalles de sus usuarios. El caso es investigado, además, por la Justicia brasileña. La Fiscalía del estado de San Pablo había dado plazo hasta ayer para que el gigante de la red informe sobre 3261 álbumes de fotos incluidos en Orkut ante las sospechas de que pueden contener pornografía infantil. Además, la Fiscalía le había advertido de que si no brindaba esa información se expone a un proceso civil y criminal.

Para el fiscal Paulo Sergio Suima, Google elude su responsabilidad por delitos cometidos por algunos de los 27 millones de usuarios brasileños de Orkut y mantiene “una posición poco negociable” en relación con la difusión de pornografía infantil, según afirmó ayer en el Senado.

Además, el fiscal sostuvo que cuando los delitos son denunciados, Google borra todos los datos de las páginas sospechosas, lo que, según dijo, “hace difícil conservar las pruebas y facilita la impunidad de los autores”.

En tanto, para Alexandre Hohagen, presidente de Google Brasil, se trata de un “problema bastante específico”. Según Hohagen, “sólo el 0,4 por ciento” de las denuncias se refiere a delitos contra niños.

No coincidió la ONG SaferNet. “Orkut todavía es el paraíso de la pornografía infanto-juvenil”, afirmó el presidente de SaferNet, Thiago Tavares. Según Tavares, “cerca del 90 por ciento de las denuncias sobre abusos de los derechos humanos en Internet” está relacionado con Orkut y “el 40 por ciento se refiere a pornografía contra niños y adolescentes”.

La ONG apunta a los álbumes cerrados, un recurso de privacidad que ofrece Orkut, que “pueden contener imágenes de pornografía infantil”. “El 75 por ciento de los álbumes de fotos es usado para intercambiar imágenes de pornografía y aparece bajo perfiles falsos”, sostuvo Tavares. De acuerdo con datos de SaferNet, en el primer trimestre del año fueron denunciadas en Brasil 13.375 páginas por contener fotos pornográficas de niños y adolescentes.

Para el senador Magno Malta, presidente de la comisión, “si Goo-gle gana dinero en Brasil, tiene que cooperar en el combate a la pedofilia”. La difusión de pornografía infantil es penada en Brasil con penas de cárcel de 2 a 6 años.

Mientras, el presidente de Google Brasil prometió nuevas herramientas para luchar contra la pornografía infantil. Así, la firma anunció ayer que la empresa estudia poner en funcionamiento una nueva herramienta “capaz de resolver el problema de difusión de mensajes ilícitos a través de la comunidad Orkut”. La tecnología permitirá filtrar contenidos de texto e imagen antes de ser colgados en la red, explicó Hohagen en el Senado brasileño.