Con un alto nivel de acatamiento según los sindicalistas se llevó a cabo ayer el paro previsto por la Asociación Bancaria en reclamo de mejoras salariales. Las sucursales del microcentro mantuvieron sus puertas cerradas y custodiadas, mientras que en el resto del país algunos bancos atendieron a jubilados y pensionados. Unos pocos funcionaron con normalidad. Los empleados bancarios también realizaron una manifestación por la city, en reclamo de un aumento salarial del 25 por ciento. El titular del gremio, Juan José Zanola, se comunicó con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, para exigirle “garantías institucionales” en la negociación paritaria. Fuentes gremiales confirmaron que de seguir “la dilación patronal, casi con seguridad se decidirá una doble jornada de protesta para la semana próxima”. Por su parte, la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) denunció que la protesta esconde “intencionalidades políticas”. La cámara que agrupa a los bancos privados de Capital Federal encuentra “inexplicable que ante la oferta de un incremento de salarios del 17 por ciento la AB haya respondido con un rechazo”.