“Hoy es Santa Rosa de Lima, somos creyentes y fue un milagro” la liberación, tras siete horas de haber permanecido secuestrado, de Santiago Borda, declaró su madre, entre feliz por haber recuperado a su hijo y preocupada porque los captores “saben muy bien de mis otros tres hijos”, y la familia había recibido amenazas hace un mes, cuando “apareció el auto lleno de sangre”. El joven de 29 años había desaparecido en la madrugada, de Villa Ortúzar, cuando, al llegar a su casa, fue secuestrado por tres hombres y una mujer, todos armados que, luego, exigieron 50 mil pesos de rescate. Siete horas después, fue liberado a cambio del pago de cinco mil pesos y 900 dólares, según informaron fuentes policiales.

De acuerdo con los investigadores, el Citroën C3 en que se movilizaba Borda al momento de ser capturado, apareció quemado en Villa Soldati, por lo que en un principio se temió por la vida del hombre. Ese mismo auto sería el que, hace cuatro semanas, “apareció lleno de sangre” en la puerta de la casa que ocupa la familia, en Roseti al 2000.

Al mediodía de ayer, al llegar a la División Antisecuestros de la Policía Federal para declarar, el propio Borda relató su día de tensión. “Eran personas jóvenes, tres hombres y una mujer, y me tuvieron amenazado todo el tiempo con armas”. Poco después, explicó una fuente policial, los secuestradores “llamaron (al padre) desde el celular de Borda y le exigieron el dinero”, tras lo cual el padre del muchacho radicó la denuncia en la comisaría 39ª. A pedido de la familia la Justicia federal, también al tanto de los hechos, no interfirió en las negociaciones. A poco de que la policía diera con el auto incendiado, las comunicaciones con los secuestradores se reanudaron, hasta que se pactó un rescate menor, que fue pagado en la zona de Villa Soldati. El joven fue liberado poco antes de las 8 de la mañana. “Si me están escuchando los secuestradores y yo llego a encontrarlos, les puedo asegurar que una madre es peor que un animal furioso”, advirtió la madre de Borda. Luego agregó: “Esta gentuza sabe quiénes somos”, pero “vamos a tener todos los cuidados necesarios”.