Los artesanos de la calle Perú, entre la avenida Rivadavia y Diagonal Sur, se instalaron ayer por la mañana con sus mantas sin mercadería para manifestar su rechazo a la decisión del gobierno porteño de prohibir la actividad en el lugar. Hubo momentos de tensión e incidentes cuando la Policía Metropolitana impidió que exhibieran sus productos. La protesta fue acompañada por legisladores, agrupaciones y otros vendedores de la vía pública que denunciaron “la falta de una solución real para los artesanos y manualistas”, algunos de los cuales fueron ubicados en la plaza Roberto Arlt, en Rivadavia y Esmeralda.

Forcejeos y algunos intercambios de golpes se registraron entre los manifestantes y agentes de la fuerza de seguridad, pero después volvió la calma. Carla Silva –que realiza artesanías en cuero en la calle Perú– señaló a Página/12: “Me presenté a trabajar como todos los días a las ocho de la mañana, desplegué mi manta y cuando intenté exhibir las artesanías, representantes del Ministerio de Espacio Público de la Ciudad levantaron mi paño y me secuestraron la mercadería de forma violenta”.

A fines del año pasado, la Legislatura modificó el Código de Contravenciones para “prohibir la venta callejera sin permiso”, pero también habilitó la creación de nuevas ferias legales en espacios públicos. Ante la posibilidad de sumar a la calle Perú como uno de los lugares autorizados para emplazar ferias artesanales, la legisladora porteña por la Coalición Cívica Rocío Sánchez Andía presentó dos proyectos en la Legislatura, que se encuentran encuadrados dentro de la Ley 4121 (normativa que regula el funcionamiento de las actividades feriales en la ciudad) y que esperan ser tratados.

Silva explicó que dentro de esa ley “se dictó una cláusula transitoria en la que se disponía el armado de una comisión extraordinaria –conformada por artesanos y miembros del Poder Ejecutivo y del Legislativo de la Ciudad– para resolver el conflicto de la calle Perú, en un lapso de 120 días”. “Pasaron más de la mitad de los días acordados y nunca se discutió el asunto, porque pareciera que el PRO nos ignora”, añadió.

“Derivarnos a la plaza Roberto Arlt, donde no hay la cantidad de gente como en esta zona, no es la solución, la venta allí no nos permitiría subsistir”, afirmó la vendedora.

Sita Díaz Zamorano, otra de las artesanas de la calle Perú, dijo a este diario que “en la comisión extraordinaria que se conformó, los artesanos solicitaron una prórroga para que no se realicen operativos de desalojo y decomiso de la mercadería como el de hoy (por ayer) hasta que se le dé tratamiento a los proyectos de la diputada Andía”.

Otro momento de tensión se vivió cuando el diputado del Movimiento Social de los Trabajadores, Alejandro Bodart, y la diputada María Rachid (Frente para la Victoria) se enfrentaron en una discusión con el diputado Martín Ocampo (PRO). De esa discusión, Ocampo debió retirarse insultado por el resto de los artesanos y tuvo que ser custodiado por personal de la Metropolitana hasta la Legislatura.

Rachid explicó que “el gobierno porteño no respeta el artículo 15 de la Ley 4121, que establece que los artesanos y manualistas que no comporten una competencia desleal para el comercio establecido pueden trabajar para mantener su oficio y, así, poder llevarle el sustento a sus familias”.

Además comentó que “no hay ninguna ley ni contravención que permita al gobierno porteño venir a secuestrar la mercadería a los artesanos”. También anticipó que elevará una denuncia penal ante la Justicia porteña por “abuso de autoridad y mal desempeño de funcionario público” durante el operativo que ejecutó la Metropolitana en la peatonal Perú.

Informe: Sabrina Améndola