Miércoles, 18 de julio de 2012 | Hoy
SOCIEDAD › EL JUEZ CONFIRMó QUE NO SE DETECTARON RASTROS DE VIOLENCIA EN EL CUERPO DE LAS DOS JóVENES
Un intercambio de mensajes de texto con su novio indicaría que María Luján había discutido con sus padres el sábado de madrugada. Yanina había sido dejada por su novio y dijo estar dispuesta a suicidarse.
Un día después de que fueran hallados los cuerpos de María Luján Peñalva y Yanina Nüesch, de 19 y 16 años, colgados de un árbol en un descampado al sur de la capital salteña, la lupa de los investigadores fue corriéndose lenta, pero no públicamente hacia la hipótesis del suicidio. Nadie lo dice, pero muchos ya lo dan a entender. El juez del caso, Pablo Farah, confirmó que no existían rastros de violencia en los cuerpos; un tío de Yanina sostuvo que era certera la hipótesis del “pacto suicida”; el novio de María Luján, Exequiel Fredes, reveló que en la madrugada del sábado la joven había discutido con sus padres, y un supuesto intercambio de SMS entre ambos revela que la joven le había dicho a su novio que se quería matar; por otra parte, un amigo de Yanina le entregó al juez un chat en el que la chica le confiaba una ruptura amorosa y se pensaba suicidar.
En una conferencia de prensa, ofrecida durante la mañana de ayer, el juez de instrucción Farah confirmó algunos de los interrogantes que los medios habían bordeado la noche anterior. Dijo que los cuerpos no presentaban “signos de violencia”; que se habían colgado con una misma cuerda; que los forenses habían fechado la muerte entre 24 y 28 horas antes de que fueran halladas (lo que lleva a la hipótesis sobre la muerte entre las 15 y las 19 del domingo). También aseguró que las autopsias en los dos cuerpos revelaron que no habían sido violadas ni se hallaron signos de violencia; que tampoco estaban embarazadas; y confirmó que en sede policial un amigo de Yanina había entregado un chat que mantuvo con la chica, en el que ella le decía que estaba dispuesta a matarse después de la ruptura con su novio.
Por fuera de la investigación judicial, el diario salteño on line elintransigente.com difundió un presunto intercambio de SMS entre Exequiel Fredes, de 23 años, y novio de María Luján, y la joven cantante hallada muerta. El intercambio de mensajes vía celular se inició el sábado a las 2.17, un cuarto de hora después de que el joven dejara en la casa de sus padres a su novia. Según declaró Exequiel en entrevistas televisivas, la joven le había mentido en el horario en que debía regresar (“me dijo que tenía que volver a las 2 cuando en realidad el padre le había dicho a las 12”). Más allá de que fuera o no cierto, los supuestos SMS revelan que en la casa de la joven se desató una discusión por la hora.
A las 2.29, Luján le envió: “Mi papá me dijo que ya no voy a grabar mi disco no no me llames me van a matar”. Más tarde, confesó la pelea con su padre: “Me dijo cosas muy feas gordo por fa comprá las pastillas y dejam segura que no me voy a embarazar ni nada”.
El temor a estar embarazada lo descartó ahora el juez Farah, al informar el resultado negativo en la autopsia. Diez minutos después, a las 2.41, Exequiel le aseguraba que: “Yo tengo que hablar con tu viejo”. Y de inmediato Luján le respondía: “Es que no hay forma gordo no nos cree a ninguno te amoo me voy a dormir no más”.
El sábado por la mañana, el intercambio de mensajes continuó. A las 7.57 ella le envió un SMS explicándole que no se podía dormir, pero no obtuvo respuesta. A las 11.02, María Luján le contó que “enseguida preparo mi bolso, me tengo que ir ya”. Y pese a la insistencia de Exequiel, María Luján le dio cuenta de que en su casa la situación es insostenible: “No sé capaz que me valla (sic) a lo de un amigo pero me están echando”.
A las 12.07, el diálogo quedó cerrado con un anuncio de María Luján: “Me voy a matar”. Después no se volvió a comunicar.
Farah sostuvo que estaba enterado de la publicación de los SMS, pero que no lo había recibido y que tenía pensado citar a Fredes para que relatara lo que sabía sobre la noche del viernes y el intercambio de SMS en el que la joven anticipó que había tomado la decisión de suicidarse.
Más tarde, se conocieron las declaraciones del padre de Exequiel, Raúl Fredes, quien sostuvo que el lunes por la noche debieron ser evacuados por la policía porque la casa donde ellos viven “intentaron quemarla y lincharnos”. “Ahora –dijo Fredes– estamos escondidos y tengo a mi familia desmembrada”, resaltó. Fredes recordó que el domingo pasado, Exequiel realizó su declaración en la Brigada de Investigaciones y en la noche de ayer realizaron una ampliación de la misma. También dijo que el noviazgo entre su hijo y María Luján Peñalva era reciente y que la adolescente era algo tímida, pero no aparentaba tener conflictos.
Farah también informó que hoy recibiría a los familiares de las víctimas y que por el momento la carátula de la causa estaba encabezada como “muerte dudosa”, dijo que no se descartaba ninguna hipótesis, pero todo empujaba hacia la idea del suicidio, carátula que según trascendidos de última hora de ayer, sería la decisión que tomaría el juez para encabezar la causa.
En sede policial, un amigo de Yanina, Ignacio Colque Cabello, de 19 años, dijo que cuando chateó con su amiga el viernes pasado, le habría hecho algún comentario sobre sus supuestas intenciones suicidas. Farah confirmó que el dato “está incorporado en la investigación policial”, y sostuvo que pedirá al joven que ratifique lo dicho en sede judicial. El juez también reveló de la escena del hallazgo que “la soga tenía un nudo en cada extremo donde fueron colocadas las cabezas, hicieron una especie de contrapeso y el cuerpo más pesado (quedó) hacia abajo y el más liviano un poquito para arriba”. También agregó que “la marca en ambos cuellos era bastante notable y ascendente hacia atrás de la oreja”, indicio utilizado por los forenses para determinar certidumbre de que no se trató de un doble homicidio.
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