La Justicia santiagueña inició una investigación por presunto abuso sexual contra una adolescente de 13 años, que ingresó de urgencia en el Centro Provincial de Salud Infantil (Cepsi) con un severo cuadro de deshidratación, fiebre y diarrea. Allí, los médicos detectaron que presentaba signos de abuso sexual, por lo que dieron intervención a la Justicia. Fuentes tribunalicias revelaron que la adolescente fue atendida en un primer momento en el Hospital de Monte Quemado, ciudad ubicada a 360 kilómetros al norte de esta capital y donde reside la chica, desde donde se la derivó en una ambulancia al Cepsi. Acompañada por su madre de 40 años, la paciente era reticente a ser revisada por un médico de la guardia, por lo que acudió una doctora a asistirla. La profesional constató que, además del cuadro por el que había llegado al centro de salud, tenía hematomas en las caras internas de sus muslos y lesiones en la zona anal y vaginal, compatibles con un acceso carnal forzado. Por eso, la médica dio participación a la comisaría 1ª del Menor y la Mujer; y un médico, no una médica, de esa repartición corroboró lo que presumía su colega, dándose entonces intervención a la Justicia.