El juez federal Daniel Herrera Piedrabuena es un magistrado de alto perfil con intervención en casos resonantes. A principios de 2011, dictó falta de mérito y sobreseyó a represores riojanos en causas por delitos de lesa humanidad, por lo que fue denunciado por la Unidad Fiscal de la Procuración General de la Nación especializada en esas causas. En un comunicado, esa unidad señaló que el juez “parece explicar los crímenes contra la humanidad en La Rioja como consecuencia de actos aislados de un grupo de gendarmes y empleados del Servicio Penitenciario Federal”. En noviembre del mismo año, fue Herrera Piedrabuena quien consideró probado que el ex obispo riojano Enrique Angelelli murió en un “accidente automovilístico provocado”, como respuesta por sus denuncias sobre asesinatos de religiosos en Chamical. En tanto, en julio del año pasado, declaró nula la investigación sobre el jefe del Ejército, César Milani, por secuestro, detención y tormentos sufridos por Pedro y Ramón Olivera, y ordenó una nueva investigación. Su decisión contrarió el pedido del fiscal Horacio Salman, quien, al igual que la defensa de Milani, pidió el cierre de la causa.