Miércoles, 9 de septiembre de 2015 | Hoy
SOCIEDAD › EL CRIMEN DE SCHAEFER
La fiscal a cargo de la investigación del femicidio de Claudia Schaefer en el country de Pilar solicitó la prisión preventiva para el imputado Fernando Farré. Carolina Carballido, titular de la UFI Especializada en Violencia de Género de Pilar, le pidió al juez que el acusado permanezca detenido ya que está convencida de que existen riesgos procesales vinculados a la posición económica del imputado que podrían entorpecer la causa.
Para Carballido, Fernando Farré debería permanecer detenido por “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por ser cometido en el contexto de violencia de género”. La fiscal realizó el pedido al juez de Garantías Nicolás Ceballos, en el que argumentó que existe “riesgo de fuga” por la pena en expectativa y por la cómoda situación económica del imputado ya que se trata de un ex gerente de compañías multinacionales de cosméticos que al ser despedido de su último trabajo, cobró una indemnización cercana a los seis millones de pesos.
Además, Carballido sostiene en su dictamen que existe otro riesgo procesal que se evalúa para dictar la prisión preventiva, relacionado al “peligro de entorpecimiento de la investigación” que podría haber en caso de que el ex gerente quedara en libertad.
La fiscal se basó en la gran cantidad de testimonios –la hermana, compañeros de trabajo, el portero, los abogados, las empleadas domésticas–, que acreditaron que la pareja atravesaba un divorcio conflictivo y que había antecedentes de violencia de género para argumentar que se trató de un femicidio, contemplado como agravante en el inciso 11 del artículo 80 del Código Penal. También destacó la brutalidad que reveló la autopsia, ya que la víctima murió degollada y tenía 74 lesiones.
En su declaración, los dos abogados que presenciaron el crimen sostuvieron que no hubo discusión previa, por lo que Carballido cree que Farré había planeado el asesinato.
De acuerdo a lo que puede verse en las grabaciones de las cámaras de seguridad del complejo Martindale, Farré llegó al country en su auto y junto a su madre a las 10.14 de aquel 21 de agosto y tuvo casi una hora para prepararse y tomar de un set que había en un taco de madera de la cocina los dos cuchillos que empleó para cometer el asesinato, ya que Schaefer llegó a las 11.10.
Catorce minutos después de su ingreso al country, Schaefer ya había sido asesinada, ya que a las 11.24 se produce el primer llamado al 911 realizado por el abogado Carlos Quirno para denunciar que Farré había atacado a su clienta en el vestidor.
El pedido de la fiscal fue presentado el lunes y el próximo jueves habrá una audiencia oral en la que cada una de las partes expondrá sus fundamentos ante el juez Ceballos, quien tiene plazo hasta el viernes para resolver el planteo de la prisión preventiva.
Si bien aún se espera fecha para las pericias psicológicas y psiquiátricas del imputado, la fiscal está convencida de que Farré era consciente de sus actos y no actuó en estado de emoción violenta, como pretende probar la defensa, ya que el informe del médico que lo revisó al entrar detenido sostiene que lo notó ubicado en tiempo y espacio.
Schaefer (44) fue asesinada por Farré (52) el 21 de agosto por la mañana en el country Martindale de Pilar, cuando fue a retirar con dos valijas sus pertenencias de la casa que alquilaba el matrimonio, en el marco de un divorcio conflictivo. La víctima ya lo había denunciado a Farré por violencia de género ante la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema. Cuando la mujer fue al dormitorio a recolectar su ropa, Farré cerró la puerta del vestidor con llave y allí la atacó con los cuchillos. Luego, salió del vestidor, se sentó en un sillón y esperó allí la llegada de la policía que lo dejó detenido por el femicidio.
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