“Pedimos que se anule el fallo que sentenció a ocho años de prisión a Belén y se disponga su libertad”, afirmó Mariela Belsky, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina. Belsky habló luego de la entrega, al gobierno de Tucumán, de un petitorio con 120 mil firmas reunidas en todo el mundo, en favor de la joven que tuvo un aborto espontáneo en un hospital local y fue detenida acusada de provocar “la muerte de su hijo” por interrumpir el embarazo en forma voluntaria. Horas después de la presentación, el gobernador de la provincia, Juan Manzur, expresó su “preocupación” por Belén y ordenó a miembros de su gabinete que investiguen lo ocurrido con la joven de 28 años para que “el caso se esclarezca lo más pronto posible”.

Manzur aclaró que es preciso “respetar a la Justicia y las decisiones del Poder Judicial”, pero de todos modos dio instrucciones a la ministra de Salud, Rossana Chahla, y a las secretarias de Derechos Humanos, Erica Brunoto, y de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, para que hagan un seguimiento del caso de la joven tucumana que fue condenada el 19 de abril por la Sala III de la Cámara Penal de la provincia a ocho años de prisión.

El pedido del gobernador fue realizado luego de la reunión que esas funcionarias mantuvieron con representantes de Amnistía Internacional, que hicieron entrega del petitorio por la libertad de Belén. La directora de Amnistía, Mariela Belsky, luego de ratificar que Belén sufrió un aborto espontáneo, aseguró que el caso “es un llamado de atención” sobre la “falta de políticas con respecto a la implementación del aborto legal, un tema que el gobierno nacional y provincial tienen que tomar en serio”.

Belsky sostuvo que en el país “hay muchos casos como el de Belén”, aunque “la mayoría de las veces son silenciados por tratarse de mujeres con alto grado de vulnerabilidad y poco acceso a información y educación”. Aseguró que “la arbitrariedad que genera que no haya una política clara con respecto al aborto hace que cientos de mujeres que acuden a los hospitales a buscar ayuda queden a la suerte de las personas que las atienden y de sus valoraciones morales”.

Amnistía Internacional entregó el petitorio solicitando la libertad de Belén, en el que se exige que “ni ella (por Belén) ni ninguna otra mujer o niña sea sometida a un proceso criminal por haber sufrido un aborto espontáneo o cualquier otra complicación obstétrica”. El reclamo cuenta con el respaldo de la Mesa por la Libertad de Belén, que reúne a unas 40 organizaciones sociales, gremiales, feministas y políticas. Se reclamó al gobierno que se inicie una investigación “rápida, imparcial e independiente” sobre “la violación de derechos” que sufrió la joven.