“En 2006, la Sedronar hizo un relevamiento sobre causas por infracción a la Ley 23.737, de Drogas, pero no hizo públicos los datos”, señaló el investigador Alejandro Corda, al destacar “la falta de investigación oficial sobre el tema. Recién en 2005 la Sedronar creó el Observatorio de Drogas, y lo hizo presionada por la OEA, que advertía sobre la falta de un espacio de investigación que sí existía en la mayoría de los países del hemisferio”. La investigación de Corda y Pablo Frisch recuerda que, tras la promulgación de la Ley 23.737 en 1989 y que, “casi simultáneamente, se creó la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar)”. Advierte que estas medidas “carecieron de un elemento esencial: la investigación social”, ya que “el estado de alarma instalado a partir de consignas como ‘hay que hacer algo ahora mismo’, o ‘quienes estén contra esto están a favor de la droga’ allanó el camino para la toma de decisiones sin el soporte de investigaciones científicas”.