El gobierno porteño presentó hoy los principales lineamientos del "Plan de Seguridad para la Ciudad de Buenos Aires que se comenzará a implementar dentro de algunas semanas", y que no "confrontará" con la tarea que lleva a cabo la Policía Federal, según aseguró el jefe de gobierno Mauricio Macri.

El proyecto incluye una fuerza de policía propia que "estará en la calle dentro de un plazo de un año y meses", de acuerdo con lo afirmado por Macri en una conferencia de prensa que brindó en la Jefatura de Gobierno acompañado por la vicejefa porteña, Gabriela Michetti, y por el secretario de Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro.

Macri opinó que "más allá de los obstáculos" para lograr el traspaso de la policía a la órbita de la administración de la Ciudad, su gobierno "no puede quedarse de brazos cruzados" y recargó la "responsabilidad de que no tener policía propia en el Poder Ejecutivo Nacional".

"No buscamos una fuerza de seguridad para confrontar, sino para ayudar a los vecinos que piden más seguridad", sostuvo Macri, quien remarcó que "hubo muchos intentos bienintencionados, pero mal hechos".

Para el jefe de Gobierno "más allá de todos estos pasos, igual es necesario el traspaso de la policía con sus recursos", tema sobre el cual el gobierno nacional sostiene que en ese caso las provincias podrían pedir lo mismo.

El año pasado, el Congreso Nacional aprobó una reforma a la denominada Ley Cafiero, anulando el artículo séptimo de esa norma, que le impedía a la Ciudad de Buenos Aires contar con su propia policía.

"Vamos a tardar un año y meses para tener a los primeros efectivos propios en la calle", remarcó el jefe de Gobierno, y agregó que el costo para la creación de la Policía Metropolitana "está en el presupuesto de la Ciudad", a lo que Montenegro agregó que "el gasto fuera del presupuesto será de entre 90 y 100 millones de pesos que se obtendrán merced a la reasignación de partidas".

Asimismo, Macri aclaró que "en esta etapa no está previsto un aumento" en las tasas que pagan los porteños, y se ocupó de aclarar que "no hay ningún despilfarro".

Antes, la vicejefa de Gobierno, Gabriela Michetti, había iniciado la conferencia de prensa afirmando que el lanzamiento del Plan de Seguridad porteña era una "iniciativa histórica", y les pidió a los vecinos de la ciudad que estén "tranquilos" porque el Ejecutivo porteño "hará todo lo que debe".

"Vamos a sumar, no venimos a hacer una confrontación ni una problemática de este tema. No venimos a pelearnos con nadie, ni lo queremos. Que el vecino sepa que su gobierno hará lo posible para que la ciudad sea más vivible", expresó.

A su turno, Montenegro, en quien recayó la explicación de los principales lineamientos del plan, indicó que el proyecto "tiende a cuidar al ciudadano" y que uno de los ejes principales de la iniciativa es la "prevención".

El plan prevé la unificación del control de seguridad de la ciudad, y hacer un registro de las cámaras que existen en la ciudad que, a decir del secretario de Seguridad porteño, "no sabemos de quién son".

"Es absolutamente imprescindible contar con una fuerza de policía prolija. Esta fuerza debe tener una fuerte respuesta con los vecinos", indicó el ex juez federal.

Montenegro también indicó que el sueldo inicial de un "oficial egresado" de la futura escuela de policía porteña será de "aproximadamente 2.800 pesos", y expresó que esa cifra que es la más alta de las que se pagan en todas las fuerzas de seguridad del país es "para prohibir que los agentes hagan tareas adicionales a las que les corresponden".

Finalmente, el ministro de Seguridad indicó que el número "necesario" de efectivos debe ser de entre doce y quince mil, y aclaró que la policía irá "armada", aunque aclaró que "sólo cuando sea necesario".