Fuentes oficiales indicaron que el encuentro en el Museo de la Nación, sede de la cumbre, y duró aproximadamente 18 minutos, en los cuales conversaron de "la relación económica entre ambos países, de cuestiones bilaterales, y de la relación entre la Unión Europea y el Mercosur".

Al respecto, la mandataria luego comentó que "charlaba con la canciller alemana que hoy tal vez los costos de producción europeos sean de una competitividad solamente soportable en el comercio intraeuropeo; está claro que el hecho de comercializar casi el 80 por ciento dentro de la propia comunidad, no les afecta tanto el tipo de cambio".

El breve encuentro poco antes de que comenzara la reunión del primer grupo de trabajo de la cumbre, donde la presidenta habló en representación de América Latina, sobre pobreza, desigualdad e inclusión, y Merkel lo hizo como representante de la Unión Europea.

Según trascendió, la exposición de Fernández de Kirchner en la cumbre, fue elogiada por la canciller federal de Alemania.

Merkel excluyó a la Argentina de su primera gira por Latinoamérica, que abarcó Brasil, México, y Colombia.

El encuentro bilateral se produjo en medio de las repercusiones por los cortocircuitos entre Merkel y el presidente venezolano, Hugo Chávez, después de que la canciller alemana instara a los gobiernos de la región a "tomar distancia" del líder caribeño.

Merkel afirmó que Chávez "no es la voz de América Latina", y a su vez, el mandatario venezolano la acusó de pertenecer a "la misma derecha que apoyó a Adolf Hitler y al fascismo".

Chávez también cuestionó a Merkel por haber visitado la región "tirando piedras".