Así, el gobernador de Córdoba, el justicialista Juan Schiaretti, consideró que "se equivocaron los dirigentes rurales con continuar con el paro", porque evaluó que "esto se les puede volver en contra en vez de beneficiarlos". Por su parte, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, les advirtió que "están tirando demasiado de la cuerda la dirigencia del campo", por lo cual consideró que "hay que llamarlos a la reflexión porque es un clamor popular". Advirtió que "es fundamental que levanten el paro porque esta medida de fuerza perjudica seriamente al conjunto de la sociedad argentina y porque cada vez que no se dialogó en la sociedad argentina nos fue muy mal".

"Espero que haya una profunda reflexión y decisiones responsables y maduras porque es un clamo popular de todos los sectores y en muchos casos a la gente se le está agotando la paciencia", enfatizó. A su vez, Schiaretti expresó que "haber levantado el paro hubiera facilitado la instauración inmediata del diálogo sin excusas de ninguna parte y, a través, del diálogo, hay que bajar las retenciones móviles".

El mandatario, quien fue el único justicialista que se animó a recibir esta semana a las entidades del agro, subrayó que los productores deben comprender que "no van a conseguir todo lo que plantean", y afirmó que "las retenciones tienen que bajar; en qué nivel bajan y si siguen siendo móviles o fijas, es algo que se verá en la mesa de negociaciones".

En la misma línea, el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain, afirmó que "hay señales muy claras de apertura para un dialogo y eso debe ser correspondido", y subrayó que "por delante está el país".

"Cuando los empresarios negociamos los salarios con los gremios, no nos sentamos a negociar con un paro. En el caso de un gobierno democráticamente constituido es lo mismo", sostuvo Lascurain a radio 10. Destacó que "acá hubo un hecho muy importante que fue el discurso de la presidenta de la Nación", Cristina Fernández, en el que llamó al diálogo. "Venimos de una crisis muy dura. Es el momento de reflexionar, de respetar las investiduras de quienes han sido elegidos", indicó.

Asimismo, el secretario de Agricultura, Javier de Urquiza, cuestionó las "posiciones individuales" e "intransigentes" del sector que, consideró, "no ayudan a resolver" el conflicto. De Urquiza enfatizó que "nadie puede pretender fijarle la agenda a la Presidenta, en esto hay que tener respeto por lo que es la Constitución, por lo que es el poder del Gobierno que ha sido elegido por el pueblo". "A mí me sorprendió que no se aprovechara la oportunidad del jueves", luego del discurso de la mandataria, "porque se ha trabajado mucho en esta dirección y creo que no se está tan lejos de la solución", sostuvo.

Por su lado, la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, la justicialista Patricia Vaca Narvaja, consideró que "aquellos que rechazan el llamado del Gobierno a acordar un plan sustentable para el sector agrario, demuestran, una vez más, que están apostando por el beneficio propio, antes que contribuir al bienestar de todos". "Asistimos con estupor e indignación a la intransigencia de aquellos que han decidido priorizar sus intereses políticos", señaló Vaca Narvaja a DyN.

A su criterio, "la decisión de continuar con las medidas de fuerza pone de manifiesto que a los dirigentes del campo no los movilizan sólo sus demandas sectoriales sino la decisión política de cuestionar un proyecto de gobierno"