Djokovic comenzó jugando de manera muy agresiva y sorprendió al balear quebrándole el servicio para colocarse 3-0 en el primer set. Después llegó la reacción del español que evitó el 4-0 y comenzó a sumar, jugando sobre todo desde el fondo de la cancha.

En la segunda manga el joven serbio no dio el brazo a torcer y el mallorquín comenzó a recuperar su mejor juego, lo que no impidió que Djokovic impusiera el suyo, más físico, y se llevara el parcial por 6-2.

Este parecía más entero en el tercer y decisivo set, pero Nadal le birló el saque desde el vamos y lo controló jugando a gran nivel, como ambos lo hicieron durante todo el partido.

Con esta victoria, el triple vencedor de Roland Garros se aseguró conservar su segunda plaza en la clasificación mundial, posición que Djokovic, ganador del Masters Series de Roma el pasado domingo, habría alcanzado en caso de acceder a la final.

Nadal se reencontrará con Federer en una revancha de la final de 2007 ganada 2-6, 6-2, 6-0 por el número uno mundial, que puso punto final a la serie de 81 victorias consecutivas del español sobre arcilla.

Los dos jugadores se han enfrentado en 15 ocasiones en su carrera con un balance favorable para Nadal de nueve victorias, siete de ellas sobre arcilla.

Federer se clasificó fácilmente para la final al derrotar al italiano Andreas Seppi por un contundente 6-3, 6-1 con absoluta autoridad en 79 minutos de partido.

Como ha hecho con todos desde principios de la semana, Federer dominó claramente a su adversario, número 43 en la clasificación ATP, que disputaba su primera semifinal de un Masters Series.

El suizo, defensor del título y vencedor en cuatro ocasiones sobre la tierra batida de Hamburgo, sólo ha perdido 19 games en cuatro partidos.

"Jugamos un largo primer set... La arcilla estaba muy húmeda y pesada, lo que facilitaba los tiros por alto y por momentos Seppi utilizó esa táctica (en el primer set). Creo que está siendo una muy buena preparación para Roland Garros", señaló el helvético, de 26 años, cuyo único título de Grand Slam pendiente es el del Abierto francés.