"Cuando entraba a la fábrica me informaron que en Colombia se había logrado la liberación de Ingrid Betancourt. Ustedes saben mi compromiso con esa causa", afirmó la jefa de Estado.

En un discurso pronunciado en el Parque Industrial de Chivilcoy, la jefa de Estado aseguró que las dos plantas industriales que hoy se inauguran se pudo realizar porque "desde aquel 25 de mayo empezamos a recuperar las esperanzas". También recordó que antes en ese parque "había un campo de soja cuando se veía una persona una vez por mes y ahora trabajan miles en diferentes" empresas.

La presidenta llamó a "agregar valor a las materias primas, porque eso es progreso, es trabajo para los argentinos". "Hace unos años fuimos el granero del mundo, pero los argentinos tenían hambre porque no tenían trabajo. Sueño con esto que estamos viendo hoy ya como presente concreto: fábricas, que son, en síntesis, trabajo, dignidad, progreso y movilidad social", afirmó.

Cristina Fernández pidió que "nadie levante mas la mano contra un hermano", al inaugurar dos fábricas en el Parque Industrial de Chivilcoy. "Hombres como Ariel (Franetovich) han sabido enfrentar la intolerancia, el agravio, que tanto daño le ha hecho a los argentinos. Yo les pido en nombre de tanta tragedia que se ha vivido, de tanta gente que no está, que no levanten más la mano contra un hermano, ni insulten a un vecino o amigo". En ese sentido, la jefa de Estado expresó que "no vale la pena que por un puñado de dólares, nos enfrentamos con el que fuimos a la escuela, con el vecino, con el que es amigo".

La Presidenta encabezó la inauguración de una planta láctea y otra de autopartes en la localidad bonaerense de Chivilcoy, acompañada del gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli; el ministro del Interior, Florencio Randazzo y el intendente local, Ariel Franetovich.