"Estamos seguros de que las autoridades chinas harán todo lo posible para garantizar la seguridad de todos los asistentes a los Juegos", declaró hoy en Beijing la portavoz del COI Giselle Davies, según informa la agencia de noticias DPA.

"En estos momentos no es adecuado que el COI comente este incidente", sostuvo Davies. "Expresamos nuestro pésame a las familias de las víctimas", agregó.

Según la agencia oficial Xinhua, los dos individuos que atropellaron a los agentes, que estaban haciendo sus ejercicios matinales junto a la comisaría, se encuentran detenidos. Uno de ellos está herido en una pierna.

Los atacantes se bajaron del camión y comenzaron a lanzar explosivos caseros a las barracas de los policías y a atacarles con cuchillos.

De acuerdo a la misma agencia oficial china, las autoridades de Beijing "tenían indicios" de las autoridades locales sobre posibles actividades terroristas de los separatistas uigures en la semana previa a la inauguración de los Juegos Olímpicos el próximo 8 de agosto.

Las informaciones apuntaban a un posible ataque por parte del Movimiento Islámico del Turkestán Oriental (ETIM).

Xinjiang Uygur es origen de numerosos grupos étnicos de Asia Central, entre los que destacan los uigures, de cultura y lengua turcomanas y religión musulmana.

China puso en marcha campañas para repoblar la zona en varias etapas, a partir de la subida al poder del Partido Comunista, en 1949, lo que convirtió a la población autóctona en una minoría sin poder fáctico en su propia región, rica en recursos minerales.

De acuerdo a las primeras precisiones conocidas, el ataque de hoy tuvo lugar frente al hotel Yijin en Kashgar, situado junto a los cuarteles de la policía de frontera.

De los 16 policías, 14 murieron en el acto y otros dos de camino al hospital.

Un empleado del hotel dijo a la agencia de noticias DPA que sus colegas "escucharon fuertes explosiones". Las calles colindantes fueron cerradas al tráfico, según los residentes.