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La presidenta argentina contó que la primera cuestión abordada en el encuentro fue el tema de Paraguay, suspendido del Mercosur tras la destitución de Fernando Lugo. "Hubo elecciones democráticas en una jornada cívica ejemplar", remarcó la Presidenta, y recordó que ya le fue dada la bienvenida al bloque al electo Horacio Cartes. Respecto a Venezuela, ambas mandatarias destacaron la declaración de la Unasur en apoyo a la elección de Nicolás Maduro como presidente. CFK destacó que ese documento tenía "un contenido muy fuerte de todo lo que pensamos los presidentes y las presidentas de la democracia".

Dilma y Cristina se refirieron además al contexto de crisis internacional, que "exige de parte de nuestros países un esfuerzo adicional al que siempre hemos hecho para enfrentar estas dificultades", expresó la argentina. "Estamos en una coyuntura de consecuencias que son bastante dramáticas para los países desarrollados", manifestó por su parte la brasileña quien llamó a ampliar el comercio bilateral y las inversiones recíprocas, además de "los flujos financieros para las actividades educativas, de investigación y culturales".

Las presidentas, que se trataron la una a la otra como "mi gran amiga", adelantaron que los equipos técnicos volverán a reunirse la semana próxima para sellar los acuerdos alcanzados hoy, y que ellas volverán a reunirse dentro de tres meses en Brasil.

Rousseff destacó "la importancia que Brasil y Argentina tienen en esta región del mundo" porque "comparten interese comunes desde el punto de vista de la justicia social, de la democracia". Además, recordó "la fantástica contribución que fue dada por dos latinoaméricanos, Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula Da Silva" y ratificó su confianza en el diálogo para solucionar cualquier inconveniente en la relación bilateral.

Sobre el final de la conferencia, las mandatarias contaron que pasaron los últimos momentos de su encuentro hablando de cine, y Dilma relató que Cristina le prometió que le enviaría la película argentina "Infancia clandestina". También dijo que ambas destacaron el libro "Recuerdo de la muerte", de Miguel Bonasso y afirmaron que era "muy cinematográfico" y que debía hacerse una película basada en él. "De esas cosas también las presidentas hablan, somos normales", concluyó la mandataria brasileña.

Esta mañana, CFK le dio la bienvenida a Dilma en el Salón de los Pintores, y luego ambas mandatarias se reunieron a solas en el despacho presidencial, ubicado en el primer piso de la Casa Rosada, que se extendió por espacio de una hora y media, y en cuyo transcurso compartieron el almuerzo. Ahora la invitada será agasajada con una cena de honor en el Museo del Bicentenario.