Cuarenta y dos personas murieron y 111 resultaron heridas en un doble atentado con coche bomba en un barrio de mayoría alawita, colectividad religiosa a la que pertenece Bashar Al Assad, en el centro de Homs. Además, dos cohetes impactaron en un complejo educativo del barrio de Al Shagur en Damasco, dejando 17 muertos y 50 heridos, aunque el OSDH no descarta que la cifra pueda aumentar.

Mientras tanto, el presidente, que ayer lanzó su candidatura para un tercer mandato presidencial, se mostró en la localidad de Malula, una población de mayoría cristiana recuperada recientemente por el ejército. Sin embargo, el gran atractivo de su campaña es su esposa Asma, a quien este mes se la pudo ver en los medios de comunicación más que en los últimos tres años, en los que incluso se especuló con que vivía en el extranjero.

Al Assad, quien también apareció junto a ella en el Día del Maestro, en el que ambos llevaban bufandas con la bandera de Siria, anunció numerosos proyectos de inversión y entregó ayuda en las ciudades más castigadas por el conflicto armado, en consonancia con los avances de las fuerzas gubernamentales en los frentes de guerra.

En tanto, cuatro nuevos candidatos se registraron ante el Alto Tribunal Constitucional para concurrir a los comicios presidenciales, según anunció el jefe del Parlamento, Mohamed al Laham, quien reveló que Ali Mohamad Uanus, Talea Saleh Naser, Samih Mijail Musa y Aza Mohamed Uayih al Halaq presentaron sus candidaturas ante la Corte, que ya ha registrado las aspiraciones de once candidatos, entre ellos, dos mujeres, en un país devastado por una guerra civil que ha provocado 150.000 muertos y más de tres millones de refugiados.